El cortijo andaluz
Conviene aclarar de vez en cuando donde estamos y a donde nos dirigimos, tomar posiciones de existencialismo e intentar despejar dudas sobre lo más probable que se nos viene encima. La ingente cantidad de analfabetos del sur de España y/o voluntades compradas por el Partido Socialista de Andalucía son los pilares básicos de la hegemonía gubernamental de este partido desde 1978. Los “100 años de honradez” ya van por 130 y estos incluyen 40 años de gobierno socialista en Andalucía, ya no hablan de los 40 años de dictadura franquista, porque al final ellos le han cogido el gustillo a la suya disfrazada de democracia.
La democracia y los sufragios libres de los electorados son interpretados según convenga es este circo inmenso llamado España y particularmente en casi la mitad de ésta, que es Andalucía, un circo con muchas más especies protegidas de las que quisiéramos las especies comunes. Si Trump obtiene una victoria solvente en las elecciones de su país, su éxito debe ser necesariamente el fracaso de todos y si el respeto al vencedor libremente elegido es esta consideración, no digamos el que dispensan a todos los americanos que lo han votado.
Pero cuando el voto tiene su origen en un analfabeto, un subvencionado permanente, un holgazán profesional o un perceptor especializado de ayudas públicas y va dirigido al Partido Socialista de Andalucía, entonces es un voto inteligente y si en vez de 40, nos vamos a 50, 60 o los años que sean de gobierno socialista, no pasa nada, lo ha elegido la gente, lo de Trump parece ser que viene de mapaches y no de personas.
Trump habla de expulsión de la inmigración ilegal y delincuente y Susana Díaz mientras, prefiere no opinar por ejemplo sobre los Eres de Andalucía, pero sí lo hace sobre la elección del presidente norteamericano, diciendo que por primera vez todos esperamos que un candidato no cumpla sus promesas electorales cuando sea investido. Esta tía es una de tantos que se creen los encargados de hablar en nombre de todos, propios y extraños, simplemente porque la marea internacional dirigida por las mafias mundialistas, ha decidido la conveniencia de eliminar del escenario a los triunfadores y ensalzar a la gentuza y a los corruptos.
La corriente es en definitiva menospreciar el triunfo honrado y la cultura del esfuerzo y promocionar lo fácil, la vagancia, la cultura de la subvención y los medios de vida cómodos e inmorales, aunque la productividad y la competitividad se vayan a la mierda, aunque nuestra Andalucía siga empobreciéndose, aunque nuestro paro se dispare y aunque sigamos liderando el ranking de corrupción política y de analfabetos de Europa,
el caso es que las oligarquías afectas al partido y los bribones se forren a cambio del voto cautivo, las voluntades compradas sobrevivan y algo más y aseguren todos ellos su futuro a costa de la miseria progresiva de la clase media, fundamental en una economía competitiva.
Ya no se suceden los incendios de haciendas y la ejecución de sus dueños por pura envidia, pero seguimos penalizando a éstos ciudadanos en Andalucía con un tipo impositivo que puede alcanzar hasta el 36,5 % en el impuesto de sucesiones, el más alto de Europa y volvemos a lo de siempre; al gobierno, a los amigos del gobierno y a la mayoría de sus votantes, este impuesto les da igual, porque tienen poco que heredar, se trata de crujir a los de siempre, a todos los que son titulares de fincas, inmuebles e industrias que han conseguido con su esfuerzo constante creando puestos de trabajo o heredado de sus emprendedores antepasados. Los que así establecen el impuesto son los que roban a todos éstos para repartir el botín entre sus amiguetes que los votan, la historia colectivista y “generosa” de siempre del socialismo y del comunismo, el espíritu de Robinson Hood, esta falacia que ya inventó Marx y ha fracasado en casi todo el mundo, pero que todavía no hemos conseguido fulminar en Andalucía, ni lo conseguiremos mientras continue el clientelismo del Partido Socialista de Andalucía.
Este es el gran cortijo andaluz, el de la Junta de Andalucía, el del Palacio de San Telmo, pero no un cortijo de ganado, de cultivos, con empleados que se ganan la vida trabajando y con productividad, el de la Junta tiene políticos en lugar de empleados, que no solucionan los verdaderos problemas de Andalucía, no produce, solo gasta, expropia las plusvalías de los emprendedores y de vez en cuando mete la mano en la caja, pero nadie va a la cárcel y esto va calando como normal en nuestra sociedad y termina convirtiendo los comportamientos institucionales delictivos en algo cotidiano, he aquí el pasado, el presente y el “alentador futuro” de Andalucía si no inventamos algo y rápido para frenar definitivamente a estos sinvergüenzas y sus amigos que han destrozado una de las regiones más ricas de Europa.
Magnífico artículo, verdad desnuda, descripción veraz de la situación en esa zona de España. Hace tiempo que comento, que El Chiringuito Español, está organizado para que una minoría cercana (cada vez menos) a la mayoría mantenga el total a base de sangre, sudor y lágrimas (al ser minoría, da igual lo que voten o dejen de votar) Mientras el resto, disfruta del “estado del bienestar” y con sus votos, además de mantenerse a si mismos a costa de los otros, mantiene, de paso, el bienestar del Estado. Y, aunque lo niegue quien lo niegue, Andalucía es el ejemplo escandaloso de… Leer más »