Anthony Weiner, esposo de Huma Abedin, se vio envuelto en un tercer escándalo sexual. Ella es la mano derecha de Hillary Clinton.

No es ella, Hillary Clinton, ni su marido, Bill Clinton, es su mano derecha, Huma Abedin, la que se vio implicada este martes en un escándalo sexual que amenaza la carrera hacia la Casa Blanca de la candidata demócrata.

La prensa estadounidense dio a conocer hoy que Abedin anunció la separación de su esposo, Anthony Weiner, al trascender que este se vio implicado en un nuevo caso de sexting, lo cual ha repercutido negativamente en la carrera de Hillary.

Resulta que Anthony, quien ya tiene un amplio expediente en este tipo de líos, envió de nuevo fotos con contenido sexual explícito a una mujer.

El fogoso marido lo hizo la primera vez en el 2011, ocasión en la que se disculpó públicamente y dijo que no volvería a suceder. No obstante, este primer tropiezo le costó la silla como congresista demócrata.

Dos años después recayó cuando era candidato a alcalde de Nueva York. La derrota fue aplastante, pero su fiel esposa, Huma, de nuevo lo apoyó y permaneció a su lado.

El domingo trascendió una tercera aventura al enviarle de nuevo fotos sexuales a una mujer y está vez la madre de su hijo no lo perdonó y horas después de hacerse público el asunto, ella anunció la separación.

“Luego de una larga y dolorosa reflexión y de trabajar en mi matrimonio, he tomado la decisión de separarme de mi marido”, señaló Abedin en un comunicado.

Pero el daño ya estaba hecho, pues comprometió seriamente la candidatura de Hillary Clinton, dado que Huma es la mano derecha de Hillary, quien la presenta como su “segunda hija”.

En plena campaña presidencial, el candidato republicano, Donald Trump ha sabido explotar políticamente el asunto y, lanza en ristre, no perdonó el mal momento que vive la máxima asesora de su rival.

Trump es muy hábil en ello y dijo que la situacin ponía una vez más en evidencia la “mala capacidad de Hillary para juzgar”.

Y apeló a un asunto delicado: “Sólo me preocupo por el país, dado que Hillary Clinton fue descuidada y negligente al permitir a Weiner tanta cercanía a información altamente clasificada”.