Venezuela aplica un nuevo sistema para controlar la distribución de medicinas
El Gobierno de Venezuela anunció hoy la aplicación de un nuevo sistema para tratar de regular la distribución de medicamentos, muy afectada por el desabastecimiento, que las autoridades han intentado, sin éxito, controlar desde hace más de dos años.
El nuevo sistema -presentado por la ministra de Salud venezolana, Luisana Melo- regula la producción, distribución y comercialización, de todos los medicamentos que se produzcan o se importen en el país, según explicó Melo a los periodistas desde el centro “robotizado” desde donde se vigilaran los nuevos controles.
El sistema controlará las únicas cinco droguerías del país, todas en manos de la empresa privada, explicó la ministra.
“Esos cinco almacenes van a estar conectados en las próximas dos semanas al cerebro donde estamos hoy”, indicó Melo, que aseguró que la distribución de medicinas en el país está en manos de un “oligopolio”.
El régimen que controlará el sitio de almacenamiento “nos va a permitir llegar a la distribución de la manera más homogénea, más equitativa de acuerdo a la necesidad”, afirmó.
Otro eslabón más, dijo, tiene que ver con la “dispensación”.
Para ello, las autoridades establecen la asistencia de un “médico de cabecera” que sea exclusivamente de los centros o ambulatorios que forman parte de la red estatal de asistencia, bandera del proyecto socialista venezolano, o de las farmacias públicas, para adquirir el medicamento.
En materia de regulación, el sistema se regirá por los canales de contraloría públicos pero además por “la contraloría social”, es decir, “el pueblo organizado alrededor de todo los establecimientos de salud para evitar las extracciones inadecuadas de los medicamentos”, dijo para referirse al contrabando y la reventa de medicinas.
El sector privado y la oposición al Gobierno de Nicolás Maduro han denunciado a los largo de los dos últimos años una escasez de medicamentos, que actualmente estaría cerca del 90 por ciento, un dato que ha sido desmentido por la propia Melo, que asegura que no supera el 20 por ciento.
El sistema anunciado hoy por la ministra, la quinta titular de Salud en los últimos tres años, se suma a otros similares implementados por sus predecesores en el departamento para regular el abastecimiento de medicinas de los que no se conocen los logros con precisión.