Civil War: España
La educación, el respeto y los debates profundos se han disipado en la cámara baja de nuestro gobierno. Hace años que los oradores desaparecieron de esos sillones, si alguna vez estuvieron ahí sentados, y en su lugar nos encontramos con barriobajeros con trajes, o sin él.
Se supone que ellos son nuestros representantes, los que deben velar por nuestros derechos y libertades, que son los que siempre mirarán con cariño hacia su pueblo y nos ayudarán con nuestros problemas. Lo siento, bienvenido a España, país de siglas y de sillones.
Me parece vergonzoso que el partido del obrero se acueste con los naranjitos buscando su supervivencia, ganando con pactos lo que no fue capaz de ganar en las urnas. Los partidos de abajo han subido el tono a un nivel chulesco y burlesco, imitando a la casta que tanto odiaban, pero luego el “Juego de tronos” pasa por negociar unas promesas con el enemigo.
Ni qué decir de los gavilanes, nuestro presidente en funciones está calcinado de tanto ponerse en el fuego por su equipo panameño, suizo y corrupto. De ejemplo, pida perdón y agache la cabeza porque su ego lo está cegando. Yo aún busco una declaración de nuestro equipo en funciones disculpándose por sus errores y dejando de hablar de la herencia recibida y de lo mal que lo hacen otros.
Esta es la nueva guerra civil española, la del descalificativo, la del “y tú más”, la de la burla y la mofa, la de quedarse con el ciudadano en campaña, la del salseo en los programas de televisión y la de las redes sociales. ¿Para qué queremos superproducciones audiovisuales si tenemos a nuestros congresistas?
La situación de desgobierno no parece tener fin, se acerca el plazo máximo y nadie quiere bajarse del burro. Parafraseando a Bécquer, volverán las oscuras golondrinas… En éste caso en forma de pancartas por nuestras calles, actos, anuncios y spam por las redes sociales. Nos intentarán dividir otra vez para que elijamos a quién queremos más y volveremos a situaciones parecidas.
Oye, que votar está muy bien, pero si vemos que todos son los mismos perros con diferentes collares, yo votaré a los gatos. Esos gatos que están ahí, no hacen ruido por ningún medio de comunicación y traen ideas distintas a los principales. Al menos no tiro mi voto a la basura, o lo pierdo por no ir a la fiesta democrática.
¿Cuánto costará a nuestros bolsillos que los de arriba se pongan de acuerdo? Porque las elecciones no son gratuitas y la paciencia del electorado tiene un límite. ¿Votará más gente en las repeticiones? ¿Votarán menos? La prórroga llega a su fin y aquí no se ve un claro favorito, todos están de precampaña por mucho que diga Errejón.
Pero claro, si somos un pueblo pasivo, que nos va eso de quedarnos en casa cuando algo está mal… Pues qué viva la Pepa y la madre que la parió, que si nosotros esperamos que los políticos arreglen las cosas con sus poderes mágicos, ellos seguirán de parranda hasta que se jacten.
Miro a los ojos de un país muy dividido, con muchos problemas, demasiadas dudas, con corruptela y sin un líder claro. Esto tiene mala pinta, se hunde un barco que empezaba a salir a flote, ¿somos un submarino?
¿El partido del obrero ? Del trabajador público… no se equivoque. Mucha igualdad mucha gaita pero la primera fractura social es precisamente la desigualdad del sector público con el privado, un obrero de la privada es exprimido para fomentar políticas socialistas que no son otras que fomentan el despilfarro del dinero del contribuyente. Clientelismo o compra de voluntades.
¡¡LA BORREGADA VOLVERÁ A VOTAR PARA QUE LES SIGAN ROBANDO!!
Fantástico artículo. Pero el principal problema de España ahora mismo es encontrar curro. http://www.cis.es/opencms/-Archivos/Indicadores/documentos_html/TresProblemas.html La falta de valores y principios le importa poco al español, lo que le interesa es la economía y trabajo. A partir de ahí lo que sea. No es tolerable que sigamos desde 2010 con una tasa de paro por encima de 20%. http://www.datosmacro.com/paro Un amigo mío titulado en “Grado en Ingeniería naval” hace menos de un año tuvo que irse a Europa a buscar trabajo. Y gracias a que puede permitírselo, porque el que no, está con un título y sirviendo mesas, mientras hay personas… Leer más »