Una carta de la familia de Andreas Lubitz, el copiloto que llevó a la muerte a 149 personas al estrellar hace un año un avión de Germanwings contra los Alpes franceses, desató hoy una gran polémica en Alemania.

En el aviso recordatorio que reproduce el diario “Bild”, los padres de Lubitz agradecen a familiares, amigos, al párroco y a la comunidad local el apoyo que recibieron tras perder a su hijo y causó enojo en los familiares de las víctimas.

El copiloto de 27 años sufría una fuerte depresión que probablemente lo llevó a quitarse la vida y atentar contra las de los pasajeros y la tripulación que viajaban el 24 de marzo de 2015 en el fatídico vuelo 4U9525 de Barcelona a Düsseldorf.

“Quisiéramos agradecer a todos los que nos respaldaron y nos ayudaron en un año lleno de horror y miedo, incredulidad, desasosiego, estupefacción, desesperación y duelo no elaborado y nos ayudaron a sobrellevar esta gran pérdida y todo lo que nos cayó encima. Hemos perdido a un ser humano cariñoso y valioso”, dice el texto que firman los padres y el hermano de Lubitz.

El mensaje causó el enojo de los padres de las víctimas porque no se refirieron a las personas que perdieron seres queridos en el vuelo. “Sólo podemos visitar a nuestro hijo asesinado en su tumba. Y en el aviso de agradecimiento la familia de Lubitz lo describe como una persona valiosa. Nuestra indignación no puede ser expresada en palabras”, comentaron los padres de una de las víctimas a través de su abogado, Elmar Giemulla.

El padre de otra víctima se manifestó comprensivo con la reacción de los padres de Lubitz, pero criticó que el mensaje no mencionase a los que murieron con él en la maniobra suicida. “Puedo entender el duelo de los padres, han perdido a su hijo. Me faltan palabras para reaccionar a esta ignorancia y falta de respeto hacia los muertos”, declaró el hombre al Bild.

En las redes sociales, sin embargo, la mayor parte de las reacciones fue a favor del gesto de la familia Lubitz. ¿Qué tiene de indignante la nota de agradecimiento de los padres? Andreas L. estaba enfermo, no era malo”, dijo un usuario en Twitter.

“¿Es que los padres no tienen derecho a llorar a su hijo? ¿Sin Bild? Los padres aman de forma incondicional. Eso es bueno”, opinó otro usuario.

La reproducción del mensaje en “Bild” coincide con la celebración en la ciudad alemana de Haltern de dos servicios religiosos en memoria de los 16 alumnos de secundario y las dos maestras que murieron al chocar el avión. El grupo regresaba de un intercambio estudiantil en un colegio cerca de Barcelona.