El conductor del autobus accidentado en Tarragona se encuentra en estado “crítico”
El conductor del autocar accidentado el domingo en Tarragona, investigado por el presunto homicidio imprudente de 13 universitarias extranjeras, se encuentra hospitalizado en “estado crítico”, informaron este martes las autoridades.
El chófer, de 62 años, fue detenido tras el accidente, pero el domingo por la noche tuvo que ser ingresado en estado grave por una contusión pulmonar, lo que impidió su declaración ante el juez programada para el lunes.
“Ha entrado en estado crítico en las últimas horas”, informó este martes Toni Comín, responsable de Sanidad de Cataluña. “Esta noche tuvo un choque séptico en el pulmón que dificulta su situación”, añadió.
El domingo a las 06H00 (05H00 GMT), el conductor, con larga experiencia, perdió el control de un autocar con 60 universitarios, muchos de ellos participantes del programa de intercambio europeo Erasmus, que volvían a Barcelona tras pasar el sábado festejando en las tradicionales Fallas de Valencia.
El vehículo se fue hacia la derecha, giró bruscamente a la izquierda y quedó volcado en el sentido contrario, donde chocó contra un automóvil. Trece chicas de entre 19 y 25 años murieron: siete italianas, dos alemanas, una rumana, una austríaca, una francesa y una uzbeka.
Los restos de cuatro de ellas, todas italianas, ya fueron identificados y podrán ser repatriados hacia su país, informó una fuente judicial.
“Entre hoy (martes) y el jueves la previsión es que la mayoría de cuerpos puedan ser repatriados”, afirmó la portavoz del gobierno regional, Neus Munté.
Otras 23 personas seguían ingresadas por las heridas sufridas en el accidente: dos en estado crítico -incluido el conductor-, tres en estado grave y 18 en estado menos grave, algunas de las cuales debían dejar el hospital este martes, señaló Comín.
El accidente causó gran conmoción en Barcelona, en cuya universidad se instaló un espacio para homenajear a las víctimas, y en Italia, cuyo primer ministro Matteo Renzi se desplazó el lunes a la zona del siniestro (180 km al sur de Barcelona) para acompañar a las familias.
Dos de ellas se personaron en el procedimiento judicial abierto, con el conductor como único investigado. Las autoridades regionales indagan si el hombre, que dio negativo en alcohol y drogas, descansó lo suficiente en Valencia antes del viaje.
Lo dicho, que si el conductor llega a ser una mujer en lugar de investigarla por presunto homicidio imprudente la estarian poniendo ahora de heroina “por haber conseguido que solo fallecieran 13 de los 60 pasajeros”. Esto ya da mucho asco.
Y seguramente se estarían preguntando todos los medios del Sistema si el accidente se ha producido porque la pobre conductora estaba explotada laboralmente y conducía más horas de lo estipulado, o si es “racional” ( palabra que emplean mucho ) los kilómetros que tenía que hacer. Al ser varón, es inmediatamente condenado como asesino imprudente, sin excusa que valga.