Para muchos, la mejor Feria del mundo
¿Qué tiene la Feria de Málaga que no tienen el resto de fiestas populares de otras ciudades en nuestro país? El aburrimiento está proscrito en la feria del Centro. La variedad de ocio es una singularidad de la fiesta en el casco antiguo, donde hay diversión para todos los gustos y para todas las edades. Cada persona, en función de sus aficiones y sus disponibilidades económicas, encuentra lo que busca. Mientras que los adultos se lo pasan en grande en las casetas, bares y restaurantes, bailando y cantando en la calle o viendo y escuchando a las pandas de verdiales, los niños tienen su espacio en la Feria Mágica, situada en la calle Alcazabilla. Los más pequeños disfrutan de una serie de actividades, relacionadas con el mundo del circo, que fomentan su imaginación y les hacen pasar un rato muy entretenido con cuentacuentos, títeres o juegos de diversa índole.
La sexta jornada del ciclo ferial volvió a demostrar que malagueños y foráneos no se cansan de compartir unos festejos que sobresalen por la alegría y el buen ambiente. La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, en su primera visita a la feria como máxima responsable del Gobierno andaluz, comprobó la potencia de la fiesta malagueña, en un día en que el calor fue más soportable que la jornada precedente. En esta ocasión, el terral no hizo acto de presencia, lo que fue agradecido tanto por la gente que paseaba por las calles como por el personal que trabajaba en casetas, establecimientos de restauración y puestos callejeros. A la sombra se estaba bien, sobre todo cuando se levantaba una agradable brisa que refrescaba los cuerpos sudorosos por la intensidad de los rayos solares.
Dentro de la amplia gama de momentos feriales, uno que nunca defrauda es el de la actuación de las pandas de verdiales. La que intervino ayer en el escenario situado en la calle Larios, en la confluencia con la de Strachan, fue la de Montes del Guadalmedina (estilo Montes), bajo la dirección de su alcalde, Pepe Sardina. Las evoluciones de los verdialeros fueron inmortalizadas en infinidad de fotografías.
Un enclave que da un especial realce a la feria del Centro es el ubicado en la calle Alcazabilla.? Es un marco en el que se entrecruzan las culturas. Así, se disfruta de la fiesta junto a la Alcazaba, el Teatro Romano, el Museo Picasso y la judería. En ese núcleo lleno de historia es donde está la feria mágica. Los niños encuentran un sinfín de elementos para disfrutar de unos momentos de alegría y felicidad en torno a elementos relacionados con el circo. Los animadores se encargan de captar la atención de los más pequeños entre las 12.00 y las 15.30 horas.
20 por ciento más de ventas
En las inmediaciones de esa feria mágica se encuentra un establecimiento de gran solera: El Pimpi.??Estas bodegas han experimentado un notable crecimiento en los últimos años. José Cobos, uno de los copropietarios de El Pimpi, dijo ayer a este periódico que esta feria están teniendo un 20 por ciento más de ventas que la anterior, que también fue buena. «La clave del éxito es apostar por una feria tradicional, con actuaciones en directo de artistas como Encarna Navarro, el coro de Alicia, Pepe Satorre o la panda de verdiales Arroyo Gálica», explicó Cobos. Según indicó: «Estamos trabajando mejor que nunca. Tenemos 132 empleados durante estos días. Está siendo una feria muy positiva, con gran alegría y muchas ganas de diversión. La gente está cansada de la crisis y desea pasarlo bien. Por eso, hay que potenciar lo nuestro y defender las tradiciones que nos hacen diferentes». También en la calle Alcazabilla se halla la casa hermandad de la Cofradía de los Estudiantes, donde se vive un excelente ambiente ferial.
Homenaje al turismo
El sector turístico malagueño se reunió ayer en un edificio de la calle Santa María en un acto de homenaje organizado por el propietario del Café Central, Rafael Prado, y su mujer, Trinidad Fernández-Baca. Representantes de hoteles, de agencias de viajes y de distintas empresas que tienen el turismo como modelo de negocio acudieron a este encuentro y, además de compartir comida y bebida, hablaron de la importancia de dar a conocer en todo el mundo las excelencias de la feria de Málaga
No faltaron al acto el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre;el concejal de Turismo, Julio Andrade, y la concejala de Servicios Operativos y de Fiestas, Teresa Porras. «Los representantes del sector turístico se merecen este reconocimiento. Por eso, todos los años lo organizamos durante la feria», señaló Rafael Prado. Para amenizar la reunión, cantó flamenco Pepe de Campillos y, posteriormente, actuó la Cuarentuna.
La feria ha entrado en su recta final. Los dos días que restan para que se despida hasta el próximo año se espera que los malagueños los aprovechen a tope. Aún quedan momentos inolvidables por vivir. El cansancio puede esperar. Esta es la Feria de Málaga. Para muchos, la mejor feria del mundo.
Es la mejor, porque te violan cinco gitanos, te roban, y la juez dice que fue consentido. ¡Te lo pasas de miedo en la feria de Málaga!