Clientes desnudos corriendo, confundir la caja fuerte con un microondas o peticiones de habitación con vistas al mar en un hotel de Praga, son algunas de las historias más disparatadas e increíbles reveladas por hoteleros de todo el mundo en la encuesta ‘Top Secret Hotels’ de lastminute.com.

En España, concretamente este curioso estudio revela historias como la de un cliente en un hotel de Barcelona que confundió el mando de la televisión con un teléfono o la del nacimiento de siete gatitos en un hotel que no admitía mascotas. En Mallorca, la ‘suite’ de uno de sus establecimientos fue convertida en escenario del rodaje de una película.

De película también fue el suceso de un hotel de 4 estrellas de Las Vegas donde la ficción superó a la realidad cuando los huéspedes encontraron nada menos que un tiburón en la piscina o la detención de un espía que formaba parte de una delegación internacional cuando salía de un hotel de Washington camino del aeropuerto, al más puro estilo de un film de acción.

Igual de sorprendente es la historia de una camarera de piso de un hotel en Duluth, Estados Unidos, que quemó la colada de un candidato presidencial, y en 45 segundos consiguió “meterse en el bolsillo” al Servicio Secreto.

Mallorca y Madrid también aparecen en el estudio como las ciudades con mayor número de anécdotas de clientes desnudos, junto a los establecimientos de Múnich, Mallorca, Dubái o Dublín.

Entre los desnudos figuran situaciones como las de huéspedes que se quedan fuera de la habitación confundiendo la puerta del baño con la de salida y deben bajar a recepción desnudos, parejas que discuten quedándose uno de los dos fuera de la habitación sin ropa o despedidas de soltero en las que el alcohol hace de las suyas.

Precisamente, la capital española fue testigo de una de las historias más extrañas cuando una pareja semidesnuda tiró el colchón por la ventana después de que el hotel les llamará la atención por estar gritando.

Algo más inquietante fue la situación que vivieron dos recién casados al encontrarse a un desconocido en su cama al despertarse de su noche de bodas. Finalmente, se descubrió que era otro huésped que al regresar al hotel de una fiesta y borracho, se había metido en la habitación de la pareja por error.

AMOR Y CAOS EN GRANDES PROPORCIONES

La “picardía española” también llegó a Milán, el personal de un hotel sorprendió a los miembros de una familia intentando trepar a la habitación a través del balcón, ya que habían reservado únicamente para dos personas.

También en tierras italianas, concretamente en Roma han tenido lugar desde peleas entre el amante y el marido de una mujer hasta encuentros encuentro entre un político y una modelo de desnudos.

El amor desmesurado también fue el protagonista de un hotel neoyorquino al que llamaron desde una Junta directiva del edificio de enfrente para quejarse acerca de la “distracción” que suponía una pareja “demasiado efusiva”.

De todos los huéspedes, el puesto de ‘reina del caos’ es sin duda para una de las clientas de un hotel de cuatro estrellas en Stuttgart, que inexplicablemente destrozó la habitación en la que se alojaba sin motivo aparante y posteriormente llamó para disculparse. Durante su estancia, la mujer rompió una botella en el suelo y con los cristales rasgó la cama y las paredes. Para terminar, extendió comida por toda la habitación, manchando incluso hasta las cortinas.