La estrella y capitán de la selección portuguesa de fútbol, Cristiano Ronaldo, descartó hacer cualquier tipo de comentario sobre su compatriota y ex entrenador José Mourinho, y se negó a mencionar siquiera su nombre.

Tras marcar el único gol de su equipo en el amistoso de ayer entre Portugal y Holanda (1-1), Ronaldo fue interrogado por los periodistas lusos sobre si se está desilusionado con el ahora técnico del Chelsea, a lo que contestó: “No voy a mencionar el nombre de esa persona porque creo que no vale la pena”.

Insistido sobre esa misma cuestión, Ronaldo -visiblemente molesto- aseguró que no quiere “citar el nombre de esa persona”, según las imágenes divulgadas por la televisión portuguesa.

Las palabras del jugador (conocidas ya de madrugada) son el último episodio de una serie de declaraciones que evidencian su distanciamiento con Mourinho, y que comenzaron con una entrevista en la que el entrenador luso defendió que el Ronaldo “original” y “verdadero” es el brasileño Ronaldo Nazario de Lima y no su compatriota.

Cristiano y el técnico coincidieron en el Real Madrid durante tres años, los dos se encuentran representados por el mismo agente, el también portugués Jorge Mendes, y ambos son considerados en su país como las principales figuras a nivel futbolístico.

Hoy mismo, el diario “A Bola” destaca la actuación del delantero madridista con su selección frente a Holanda y le apoda “capitán gol”, ya que el de ayer fue su tanto número 40 al servicio del conjunto de las “quinas”, sólo uno por debajo del legendario Eusebio.

Sobre su renovación con el club blanco, al que le une un contrato que termina en verano de 2015, Ronaldo aseguró no sentirse preocupado por estas negociaciones y afirmó que el público será “informado sobre la situación más pronto o más tarde”.

El delantero alabó al nuevo técnico del Real Madrid, el italiano Carlo Ancelotti, al que calificó de “gran entrenador” y con el que dijo sentirse “feliz” trabajando juntos.

Asimismo, marcó como objetivos principales para esta temporada la Liga y la Liga de Campeones después de que la campaña pasada el conjunto blanco sólo consiguiera la Supercopa de España.