El hospital Virgen Macarena, arriba, y el Virgen del Rocío tienen un único gerente

Llevaba más de dos meses cerrada a cal y canto y equipada tras una costosa obra y ayer abrió la nueva Unidad de Ictus del Virgen Macarena, sin «médicos de urgencia», dicen los sindicatos; y con todos los servicios técnicos y humanos, señala el hospital en un extenso comunicado en el que no desmiente la precariedad de la que hablan los trabajadores.

«En precario, deprisa y corriendo por la presión que ha habido pero sin medios humanos porque los técnicos ya estaban», dicen Reyes Zabala, del Sindicato de Enfermería, Satse; y, Rafael Carrasco, del Sindicato Médico de Sevilla.

Según Zabala, el neurólogo sólo está hasta las ocho de la tarde para, a partir de esa hora, dejar para las incidencias que se vayan originando a residentes de tercer y cuarto año de Neurocirugía.

Eso en cuanto a la atención médica porque, si se trata de una intervención quirúrgica, el neurocirujano en presencia está en el Virgen del Rocío mientras que en el Macarena hay uno localizable que se comunica con su compañero «por teléfono u ordenador».

«Todo esto —dice Reyes Zabala— es fruto de la improvisación, de la ausencia de un proyecto sobre la unificación, que ya reconoció Torrubia que no existe y que, como venimos diciendo nosotros, tiene sus efectos en la asistencia».

Carrasco también destaca la precariedad y confirma que la unidad ha abierto «sin neurológo de guardia ni cirujano de guardia después del tiempo que ha permanecido cerrada».

A estas denuncias fuentes del Virgen Macarena han contestado con una extenso comunicado en el que aseguran que la unidad «llevará a cabo un trabajo multidisciplinar de personal especializado con protocolos de cuidado y diagnóstico terapéuticos para conseguir una evolución, prevención y tratamiento precoz de las posibles complicaciones originadas por la enfermedad».

Los ocho sindicatos sanitarios con representación en todas las categorías profesionales tenían prevista para esta semana celebrar asambleas tras la decepción que se llevaron el martes pasado en la reunión con Torrubia el cual no les mostró proyecto alguno de la unificación ni despejó sus temores sobre los recortes laborales y asistencia les a los pacientes pero las han pospuesto para el próximo día 30 y el jueves 2 de mayo porque mañana miércoles el gerente se reunirá en el Macarena con la Junta de Personal y estiman más prudente esperar a ver qué dice en esta ocasión.

Dichas asambleas tienen como objeto transmitir a los trabajadores de los hospitales que los sindicatos siguen sin saber las consecuencias de la fusión y decidir las medidas que van a tomar ante los ercortes que el SAS está llevando a cabo desde, al menos, el pasado mes de noviembre «para ahorrar 500.000 euros al año».