Los Gobiernos de Argentina y Chile han declarado la alerta amarilla y naranja en las localidades más próximas al volcán Copahue, que se encuentra en erupción desde el pasado viernes. Las columnas de cenizas superan ya el kilómetro de altura.

Las autoridades argentinas anunciaron este domingo que mantienen la alerta amarilla por la erupción del volcán Copahue en la frontera con Chile, pese a que el país vecino elevó de naranja a roja la alerta y activó un plan para evacuar cuatro poblados si aumenta la actividad volcánica.

El Comité Operativo de Emergencia de la provincia argentina de Neuquén (suroeste) mantuvo por segundo día consecutivo la alerta amarilla y aseguró que la erupción no supone por ahora una amenaza para las localidades más cercanas al Copahue.

El alcalde de Caviahue, Óscar Mansegosa, explicó que se ha repartido agua potable entre la población de esta turística localidad, situada en la falda del volcán, y reiteró que, por el momento, “no hay riesgos” y no es necesaria la evacuación.

Al otro lado de la frontera, en cambio, la Oficina Nacional de Emergencia de Chile (Onemi) decretó la alerta roja para el municipio de Biobío, el más próximo al Copahue, y preparó un plan de evacuación que, de ponerse en marcha, afectaría a casi 2.000 personas.

El Servicio Nacional de Geología y Minería de Chile (Sernageomin) emitió hoy un informe según el cual el Copahue presenta en su actividad superficial incandescencia, y una columna de humo y cenizas de entre 1 y 1,5 kilómetros de altitud que se desplaza en dirección sudeste, hacia territorio argentino.

El Observatorio Vulcanológico de Los Andes del Sur indicó también que desde las 00:43 GMT de este domingo se registra una actividad sísmica continua, de menor magnitud, en este volcán de 2.997 metros de altitud.

El último episodio eruptivo del Copahue, cuyo nombre significa “aguas sulfurosas” en mapundungun, el idioma mapuche, data de 1992.