FM/Remitido.- “Los trabajadores autóctonos no sois ni rentables ni competitivos. Primero, ganáis demasiado dinero; segundo, tenéis demasiados derechos; tercero, aglutinados en torno a la nación podríais dar problemas; cuarto, sois prácticamente estériles. ¿Qué sentido tenéis…? Sois un lujo prescindible que en estos momentos de transición hacia el triunfo del Mercado y el Capital.

Si se producen deslocalizaciones de empresas hacia el Tercer Mundo, donde los salarios y las condiciones laborales permiten una producción más competitiva, también se puede hacer a la inversa, es decir, deslocalizar mano de obra del Tercer Mundo, el lumpenproletariado de todos los rincones del globo, para sustituir a unos trabajadores autóctonos que no son rentables y permitir una orientación salarial y laboral que permita una producción más competitiva. Y ahí es donde entra la inmigración masiva. Han venido para sustituiros en ese mundo del triunfo absoluto del Mercado y del Capital que está a la vuelta de la esquina.

Porque, que no os quepa duda de un par de cosas. Primero, que si la inmigración resultara un obstáculo para el triunfo del Mercado y del Capital, en España no hubiera entrado ni un solo inmigrante; segundo, y que se os meta en la cabeza, que los inmigrantes no han venido para haceros vuestras revoluciones, ni a acabar con el Capitalismo, ni a luchar contra el patriarcado y todos esos juguetes con los que la izquierda os tiene entretenidos: han venido aquí para prosperar, para aprovechar todas y cada una de las oportunidades que pueda ofrecerles el Capitalismo, y para sacar todo lo que puedan del Estado del Bienestar que pagáis vosotros… y si para que ellos y sus hijos prosperen y lleguen lo más lejos posible, tienen que pasar por encima vuestro y por encima de vuestros hijos, lo harán ¡vaya si lo harán!.

Y lo más indignante es que no os dais cuenta de lo que os han hecho y os están haciendo. Es más, el capital y la izquierda os han manipulado precisamente para hacer todo lo posible por que traguéis con todo el proceso y que, de hecho, hagáis todo lo posible para acelerarlo; e incluso que lo financiéis, porque los grandes gastos que supone la inmigración masiva lo estáis pagando vosotros a tocateja. ¿Puede haber una derrota más total que la vuestra? Me parece que no.

Y es que, la fuerza del trabajador, la fuerza del proletariado está sobre todo en dos cosas, en el número (proletariado: prole, hijos, ya sabéis: esas cosas que os han dicho que son de ultraderechistas) y en no poder ser sustituida, porque, ¿cómo se va a sustituir la fuerza de trabajo de una nación…? Es más… ¿cómo iba el proletariado consentir el ser sustituido?… Pues el proletariado autóctono lo ha consentido y lo ha promovido, engañados por el Capital y la izquierda . Hace falta un recorrido largo y mucho trabajo lavando el cerebro de los trabajadores para llegar a este punto.

Hay que infantilizar a la población, hay que eliminar todo sentido de trascendencia, de continuidad, hay que fomentar el hedonismo, hay que robar la nación a los trabajadores, hay que hacer que los trabajadores autóctonos se sientan culpables de todos los males del mundo, de todas las miserias del mundo, de todo el hambre del mundo, hay que conseguir que desconozcan su Historia y que lo poco que conozcan lo aborrezcan… una gran cantidad de cosas que durante décadas os han hecho al alimón la derecha liberal y la izquierda “antiracista”, jugando al poli bueno y poli malo. Y os habéis tragado el anzuelo hasta la caña, de tal forma que la “crisis” es solo la forma en la que tiran del sedal.

No os engañéis: ya no hay “lucha de clases”, porque la guerra ha acabado hace mucho tiempo. Y habéis perdido, precisamente porque habéis estado en el bando del Capital y el bando de la inmigración masiva, y ni os habéis enterado.

Un panorama desolador para vosotros, desde luego. ¿Qué queda? Me temo que ya nada. O al menos, yo no os veo solución. Quizá la haya, pero aunque la haya, y creáis lo que creáis, vosotros continuaréis una y otra vez trabajando en el bando del Capital y el bando de la inmigración masiva. Muy indignados, muy enfadados, muy revolucionarios, muy antiracistas… pero en el bando del Mercado, del Capital, y de la inmigración masiva. No sabéis hacer otra cosa. No habéis hecho otra cosa, y me temo que no podéis hacer otra cosa porque os han lavado el cerebro para que acépteis y promováis vuestra sustitución por inmigrantes.

Puede que tengáis vuestro papel, eso sí, en este proceso de transición al triunfo del Mercado y del Capital. Probablemente, vuestro destino sea el de trabajar hasta morir para pagar impuestos con los que facilitar al máximo vuestra sustitución por inmigrantes. No os creáis tan especiales: otros pueblos y civilizaciones han desaparecido de la Historia y han sido sustituidos y el mundo ha continuado su marcha.