«No sé por qué sucedió esto. Los chiquillos salen por la noche y pasan cosas?». Dionisio Santana es el padre del joven dominicano de 23 años asesinado a puñaladas en la madrugada de ayer por un compatriota, vecino de Ciudad Naranco, que ya ha sido detenido, tras una discusión en la calle Real Oviedo. La Policía trabaja sobre la hipótesis de que se trata de un ajuste de cuentas por una deuda relacionada con el tráfico de drogas.

Los hechos se produjeron durante la madrugada del lunes entre las calles Independencia y Real Oviedo. El supuesto asesino, de 22 años, se dirigía a un bar de la zona de ambiente dominicano donde había quedado con unos amigos. En las cercanías del local se percataron de la presencia de un Audi en el que viajaba la víctima en compañía de otros tres compatriotas, todos vecinos de Avilés. Al parecer el supuesto asesino había sido amenazado semanas antes por una deuda de drogas. En ese momento el coche aceleró y los dos dominicanos emprendieron la huida. Treinta minutos después, y tras creer que habían despistado a sus perseguidores, volvieron al local. Al entrar fueron sorprendidos por sus compatriotas.

Se inició entonces una pelea en la que el grupo de cuatro dominicanos supuestamente agredió varias veces al detenido con una barra de hierro. Éste sacó entonces un cuchillo que portaba y comenzó a dar puñaladas al aire. Una de ellas alcanzó a Dionis Santana Santana. En ese momento, y según algunos testigos, el tumulto llegó a su fin y la víctima entró en el coche por su propio pie y sin síntomas de sufrir una herida mortal.

Ya en el coche sus compañeros se dieron cuenta de lo que sucedía y optaron por trasladarlo al Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA). Sobre las 4.10 horas de la madrugada del lunes los servicios de urgencias del HUCA alertaron a la Policía Nacional de la situación. La patrulla que acudió al centro sanitario llegó instantes después. Pero el joven ya había fallecido. La Policía Nacional comenzó entonces una investigación que se cerró en ocho horas y sirvió para dar con el supuesto homicida, que fue detenido en casa de su madre.

El fallecido, que el próximo 23 de noviembre iba a cumplir 24 años, residía en Avilés junto a sus padres y hermanos. Su padre, Dionisio Santana, encabezaba ayer el velatorio en una sala del cementerio avilesino de La Carriona. Con el gesto roto de dolor por lo sucedido habló con este periódico para dejar claro que su hijo «era un chico muy tranquilo y trabajador, sólo que ahora no hay trabajo, tampoco para mí», y que se alegra -«¿Cómo no me voy a alegrar», dijo- de que hayan detenido al presunto homicida de su hijo Dionis Santana Santana.

La familia emigró hace ocho años desde Santo Domingo a España en busca de trabajo. Su primer destino fue Madrid, donde, según explicó su padre, Dionis Santana trabajó en una conocida cadena de supermercados. Hace cuatro años, cuando el trabajo en la capital se acabó, decidieron hacer la maleta e instalarse en Asturias, concretamente en barrio de El Pozón de Avilés, donde tienen familiares y amigos.

La comunidad dominicana residente en Avilés se acercó ayer al velatorio para despedir al joven y arropar a la familia en tan difíciles momentos. Todos coincidían en destacar el carácter «tranquilo» del joven apuñalado, que no solía hacer vida por Avilés. En un principio la intención de la familia es la de repatriar el cuerpo del joven a Santo Domingo, la capital de la República Dominicana. La familia, de origen humilde, no ha podido costear a los gastos del entierro, de ahí que el velatorio se haya celebrado en una sala del cementerio de La Carriona, en lugar del tanatorio. La Embajada ya se ha puesto en contacto con los servicios fúnebres para hacerse cargo de la repatriación del cadáver, que está previsto que se realice en las próximas horas. Aunque a última hora de la tarde de ayer estaba previsto que el funeral se celebre hoy en Avilés, a las 18 horas.