La desatención por parte del gobierno municipal ha propiciado que un nutrido grupo de vecinos de La Mina acudan a representantes de Plataforma per Catalunya (PxC) para poner fin a la marabunta de jeringuillas que inundan las inmediaciones de un CAP.

Anglada, junto a la portavoz identitaria en el consistorio, Menchu Martí, ha mantenido una reunión en la que los vecinos de la localidad barcelonesa le han manifestado su hartazgo por la desesperante situación.

El líder identitario se ha hecho eco de las quejas vecinales, que alertan del peligro que supone la presencia de un dispensador de jeringuillas sin ningún tipo de control ubicado cerca de un centro escolar. “Se pueden llegar a suministrar 2.000 diarias, y tras ser utilizadas algunas de ellas se abandonan en un parque infantil contiguo”.

Por su parte Martí ha asegurado que “el lugar se ha convertido en un centro de peregrinaje para drogodependientes de otras comarcas en el que los toxicómanos se inyectan la droga en los portales”.

Sin embargo el gobierno municipal prefiere mirar a otro lado. “Es un tema que hemos expuesto en varias ocasiones en los plenos y contestan diciendo que no volverán a hablar del asunto porque daña la imagen de la ciudad” –ha agregado la concejala.

El líder de los sidentitarios catalanes y españoles ha manifestado su indignación por la pasividad de “un equipo de gobierno que no tiene el valor de afrontar un problema de extrema gravedad”, y se ha comprometido con el vecindario para extirpar este problema de barrio.

En esta línea, Anglada ha expresado su intención de acudir personalmente al pleno municipal de Sant Adrià, acompañado de los vecinos, para exigirle al alcalde que clausure la sala que dispensa jeringuillas.