Los jugadores españoles del Swansea celebran un gol que reinvidica la unidad de España
Ramis, Pablo, Rangel y Michu celebrando el gol | Captura Canal +
Los jugadores españoles del Swansea han celebrado esta tarde uno de los goles al Wigan con una imagen poco habitual. Los cuatro (Ramis, Pablo, Rangel y Michu) se han acercado al banquillo para lucir tres camisetas con las sílabas que forman la palabra ‘España’ y la bandera rojigualda. Debajo se podía leer sus lugares de nacimiento, entre ellos Tarragona, en Cataluña.
Este festejo, que ha llegado después de un tanto de Michu, se ha interpretado como una forma de reclamar la unidad de España teniendo en cuenta que, como ya se ha señalado, uno de estos futbolistas (Rangel) es catalán.
Además, el Swansea es un equipo galés, algo que llama la atención toda vez que es una de las regiones que tiene la opción de jugar con su selección partidos internacionales, algo que reclama desde hace tiempo Cataluña.
¿Donde veis que Àngel Rangel (se lee Ànyel Ranyel) lleve la banderita de espaNYa? Es el único que se ha desmarcado de esta celebración.
Encima de subnormales, ciegos.
Déjalos, que son felices en su ignorancia.
Los apellidos Ramis y Rangel son muy catalanes. Son catalanes de “nissaga”, de estirpe, de toda la vida. ¡Bravo!
Yo retiré mi dinero de BANCO SABADELL la semana pasada y dejé constancia de mis motivos. Cualquier español con conciencia podría plantearse algo parecido. A finales de septiembre dirigí al director de mi sucursal una carta -ligeramente irónica- que libero por si alguien la quiere usar con el SABADELL, CAIXABANK, CATALUNYA CAIXA o cualquier otra entidad bancaria catalana que opere en el resto de España… “Desde hace algunos años me cuento entre sus clientes. He suscrito depósitos a plazo, soy titular de cuentas corrientes, tarjetas, etc. siempre a plena satisfacción. Sin embargo, llevo varios días considerando seriamente la posibilidad de… Leer más »
“Yo retiré mi dinero de BANCO SABADELL la semana pasada dejé constancia de mis motivos”. Como no tuvieras varias decenas de miles de euros no te debieron ni escuchar.
Magnífico gesto.