El Gobierno del Reino Unido destinará más de cinco millones de libras esterlinas (más de 7,5 millones de dólares) a ayudar a la oposición siria, según ha declarado el ministro de Exteriores del país, William Hague.

Esta ayuda se destinará a los que luchan contra el Gobierno de Al Assad a través de medios pacíficos, aseguró el jefe de la diplomacia británica. Según Hague, la oposición siria necesita una ayuda cualificada.

El Reino Unido planea suministrar a los opositores de Al Assad medicamentos, chalecos antibalas, dispositivos de comunicación, etc. Asimismo, los especialistas británicos están dispuestos a ayudar a adiestrar el personal médico y a los periodistas que trabajan para la oposición del Gobierno sirio.

El ministro de Exteriores del Reino Unido también hizo hincapié en la necesidad de adiestrar a los activistas civiles para que puedan recoger pruebas de los supuestos delitos de los partidarios del mandatario sirio para “los futuros procesos judiciales” a los que serán sometidas las actuales autoridades sirias.

Hague apuntó que 60 activistas civiles sirios ya habían terminado un curso de adiestramiento en Gran Bretaña y están listos para recoger y analizar las pruebas de las violaciones de derechos humanos. Asimismo las autoridades británicas ya han asesorado a más de cien “periodistas civiles” sirios, según el ministro.

Anteriormente el Gobierno británico ya había asignado alrededor de 2,3 millones de dólares para apoyar a la oposición siria. De este modo, la ayuda anunciada por el titular de Exteriores británico sería más de tres veces mayor que el monto anterior.

A pesar del considerable tamaño de la ayuda británica, el Reino Unido no es el mayor donante de financiación a la oposición siria. Actualmente EE.UU. está a la cabeza con 25 millones de dólares de ayuda anunciada oficialmente.