Las familias y empresas que se declararon en suspensión de pagos y quiebras ascendieron a 2.272 en el segundo trimestre del años, lo que supone un incremento en un 28.6% en comparación con el mismo periodo el año anterior, y la más alta de la crisis.

Según la Estadística de Procedimiento Concursal del Instituto Nacional de Estadística, las empresas en concurso aumentaron un 36.2% en el segundo trimestre, mientras que las familias cayeron un 12.1%. En comparación con el primer trimestre del año, el número de deudores concursados aumentó un 2.2% entre abril y junio, con un crecimiento del 3,5% de las empresas declaradas en quiebra y un descenso del 7,5% en las familias.

Sentro de las empresas, 355 eran sociedades anónimas, mientras que 1566 eran sociedades limitadas. El 30.8% de las empresas declaradas en concurso tenían como actividad principal la construcción y la promoción inmobiliaria. Por detrás de esta se situaron la industria y la energía, sector que aglutinó el 18.3% de las empresas; y el comercio, con el 17.4% de concursos.

En cuanto a comunidades se refiere, Cataluña, la Comunidad Valenciana, Madrid y Andalucía fueron las comunidades con mayor número de declaraciones de concurso en el conjunto del segundo trimestre. En cambio, Navarra, Cantabria, Extremadura y La Rioja fueron las regiones con menos suspensiones de pagos.