Los cables del Departamento de Estados de los Estados Unidos siguen apareciendo luego de la gran filtración motorizada por la organización Wikileaks. Ahora, el diario El País, que había tenido acceso exclusivo a esos documentos, asegura que el gobierno norteamericano se manifestó en varias oportunidades preocupado por supuestos casos de corrupción en la Argentina y por la inacción de la Justicia.

Según el diario español, la embajada norteamericana en Buenos Aires envió al Departamento de Estado más de cien despachos confidenciales, durante varios años, en los que alertaba sobre lo endeble del sistema judicial en los supuestos casos de corrupción.

Uno de los hechos que llamaron la atención de los diplomáticos fue la renuncia, en marzo de 2009, del fiscal anticorrupción Manuel Garrido, que dejó su cargo alegando que no contaba con las condiciones para seguir con su trabajo. “Los recientes movimientos del gobierno argentino socavan la independencia y la eficacia de los organismos con jurisdicción sobre casos de corrupción”, había expresado la embajada en ese momento.

“Los escándalos por corrupción en Argentina comienzan con mucho ruido para disiparse después en el olvido, debido a la parsimonia de las ‘investigaciones’ y el interminable peloteo judicial a los que son sometidos”, indica otro despacho.