El seleccionador nacional de Alemania, Joachim Löw, no quiso pronunciarse sobre las connotaciones políticas del partido que enfrenta a su equipo con Grecia en el segundo de los cuartos de final, calificando el partido de “normal”. El partido, calificado por la prensa de ambos países como el ‘choque de la Eurozona’, enfrenta al país europeo más afectado por la crisis económica y al que impone sus políticas en toda la Unión Europea: “Angela Merkel y yo tenemos una buena relación y un acuerdo por el cual ella no me aconseja en la alineación de jugadores y yo no le aconsejo en decisiones políticas. Es solo un cuarto de final normal contra Grecia y nada más”, zanjó sobre ese tema.

Preguntado por Karagounis, que no podrá disputar el partido al estar suspendido, Löw afirmó que cree que “es quien ha tenido las grandes ideas en los partidos de Grecia durante años. Él es la conexión entre la defensa y los jugadores en ataque y su ausencia en Grecia es mala para ellos”, aseguró.

El equipo alemán se entrenó este martes con la ausencia de Mesut Ozil, Bastian Schweinsteiger y Lars Bender, todos ellos con pequeños golpes después de la victoria de 2-1 ante Dinamarca, aunque el preparador apuntó que fue “puramente una medida de precaución”. “Están en forma”, recalcó. Mesut Ozil, que todavía no ha brillado con claridad en la Eurocopa, también fue objeto de las palabras de Löw. “Va a haber una explosión de Ozil en este campeonato, como en Sudáfrica después de la fase de grupos”, concluyó.

Por otro lado, el central Holger Badstuber aseguró que “Grecia no va a ser un oponente fácil. Ellos no se conforman. Defenderán bien pero también tienen sin duda impulsos ofensivos. Tenemos que estar concentrados y no tomar este partido a la ligera solo porque son un equipo más pequeño”, finalizó el defensa.