En total 42 menores y siete adultos fueron rescatados en la madrugada del viernes a bordo de una patera en las costas granadinas. Todos fueron conducidos al centro de internamiento del puerto de Motril y su estado de salud no corría peligro. La Policía Nacional empezó ayer a practicar a los jóvenes las pruebas oseométricas para determinar su edad, y de confirmarse que son menores, pasarán a disposición de la Junta.

La llegada masiva de menores inmigrantes a las costas andaluzas reactivó ayer un conflicto latente entre el Gobierno andaluz y la Administración central. La consejera de Igualdad, Micaela Navarro, calificó de “insostenible” el número de menores no acompañados que llegan y exigió al Gobierno la activación de un plan para repartir su acogida y atención entre las diferentes comunidades autónomas. No es la primera vez que Navarro denuncia que la llegada de menores al país no debería ser un asunto andaluz, sino nacional.

Hace casi un mes arribó a la costa granadina otro grupo de 31 menores magrebíes, de entre nueve y diez años, que “ya avisaban de que en los próximos días llegarían del entorno inmediato a la aldea de la que provenía otro nuevo grupo de menores”, recordó ayer la consejera. “La situación empieza a ser insostenible, como lo fue hace dos años.

CRECIENDO

En este momento, de febrero de 2011 a febrero 2012, ha crecido un 50% el número de llegadas”, aseguró Navarro, que calculó “en torno a 1.100”, los menores acogidos en Andalucía, una “cifra a todas luces imposible de sostener”. La consejera también instó a Marruecos a colaborar en el control de la inmigración en el Estrecho. “Andalucía no se puede convertir en el lugar de acogida y residencia de todos los menores de Marruecos de todos aquellos menores cuyas familias, además, tienen supuestamente los recursos necesarios para supuestamente pagar ese viaje”, dijo.

La delegada del Gobierno en Andalucía, Carmen Crespo, no entró a valorar este aspecto, pero sí quiso explicar que el Ejecutivo de Mariano Rajoy está reforzando la asistencia en las costas con la Unidad de Vigilancia del Estrecho y también las posibilidades de auxilio “para evitar problemas mayores y poder atender a personas que buscan un mundo mejor cruzando el mar”.

Los inmigrantes rescatados ayer, de origen magrebí, tan solo llegaron con síntomas de hipotermia. Uno de ellos tuvo que ser trasladado al Hospital de Santa Ana de Motril para ser atendido por una herida que presentaba en la mano, y recibió varios puntos de sutura. La patera, de seis metros de largo y dos de ancho, fue detectada por el Servicio de Vigilancia de la Guardia Civil hacia las 0.50 horas del viernes a unas diez millas de Castell de Ferro (Granada).