El Real Madrid ganó al Zaragoza (3-1) en el partido correspondiente a la vigésimo primera jornada de la Liga BBVA, disputado este sábado en el estadio Santiago Bernabéu, por lo que los blancos consiguen su quinta victoria consecutiva en Liga mientras que el Zaragoza suma 13 partidos sin ganar.

El equipo blanco parecía muy superior a los maños en todo momento, pero el Zaragoza puso mucho empeño y le dio problemas a los de Mourinho, sobre todo a raíz de la sorpresa del gol de Lafita en el minuto 11, al aprovechar un despiste defensivo que agradeció Aranda dándole un balón muy fácil a Lafita para marcar. Kaká tuvo el empate en dos ocasiones, una de cabeza y otra con el pie derecho, pero no acertó entre los tres palos, algo que sí consiguió en el minuto 32 tras aprovechar un balón en profundidad de Carvalho para plantarse solo ante Roberto y poner el 1-1 en el electrónico.

En la segunda mitad, el Real Madrid salió con ganas de cerrar pronto el partido y a los cinco minutos de la reanudación ya se encontraban con ventaja. Cristiano Ronaldo culminaba una gran jugada en la que zil le habilitaba desde la banda derecha para poner el 2-1 y dar al traste con las esperanzas mañas. Los blancos seguían con su juego, buscando la portería contraria y no tardaron en ampliar diferencias tras una gran triangulación entre Granero, Kaká y Ozil a la que ponía fin el alemán con un disparo que batía a Roberto estableciendo el 3-1 definitivo.

RAYO VALLECANO, 2- ATHLETIC DE BILBAO, 3

Enseguida se adueñaron los madrileños de un partido en el que el Athletic sufrió la embestida rayista con algunas dudas en la línea de defensa. En el minuto 11, Michu remató a gol un córner botado por Trashorras.

Pero, cuando más problemas estaban teniendo los de Bielsa, apreció Llorente, el de siempre, para remontar el tanto inicial; en el 16, el delantero riojano acertó con un soberbio remate de cabeza y, en el minuto 22, se inventó una magnífica jugada en la que controló y bajó el esférico a la perfección para sacar un remate que sirvió para adelantar a los ‘leones’.

Antes de llegar al descanso, Tamudo, que había protagonizado algunas de las jugadas de mayor peligro, tuvo que retirarse lesionado, y dejó su sitio a Rayco. Pero no todo fueron malas noticias para los de Sandoval, que pudieron marcharse por el túnel de vestuarios con el empate en el marcador gracias al tanto de Arribas, que aprovechó un mal rechace de Iraizoz para marcar a placer.

Tras el descanso, los rojiblancos saltaron al campo dispuestos a llevarse los tres puntos de Vallecas. Los locales, con más ocasiones pero menos efectividad que su rival, pusieron en pie al público cuando Michu no encontró remate tras un mal despeje de Iraizoz.

El que no falló fue Fernando Llorente que, en el minuto 67, certificó el triplete gracias a un nuevo remate de cabeza y al ‘regalito’ de Cobeño, que había salido en el segundo tiempo para sustituir al lesionado Dani Giménez.

Poco después del gol, el Rayo reaccionó y a punto estuvo de poner la igualada, pero Rayco no consiguió rematar un pase de la muerte de Piti. A partir de ahí, se vivió un final de partido en el que el Rayo, que firmó un gran encuentro y recibió quizá demasiado castigo, volvió a desperdiciar alguna ocasión para salvar un punto. Con este resultado, el Athletic vuelve a soñar con Europa, mientras que el Rayo continúa a tan sólo tres puntos del descenso.

ESPANYOL, 1- MALLORCA, 0

El partido comenzó accidentado y con muchas interrupciones en el juego por parte de ambos conjuntos, que venían de ser eliminados en Copa por el Mirandés y el Athletic. Los dos equipos se mostraban respeto e intentaban imponer su juego poco a poco sobre el césped.

Pasaban los minutos y Rui Fonte tuvo una clara ocasión en un uno contra uno frente a Aouate, ante el que no supo resolver. ‘Chori’ devolvió el golpe en la meta de Casilla, pero justo después llegó el primer gol del conjunto perico.

El eslovaco Weiss peleó un balón en profundidad y en el choque, el defensa bermellón chocó contra Aouate que perdió el equilibrio y el balón, lo que aprovechó el delantero para sumar el 1-0 en el marcador en uno de los goles más absurdos de la Liga.

Con el 1-0, el conjunto blanquiazul dispuso de mejores ocasiones para aumentar la distancia en el marcador. Mientras, los de Caparrós centraban el ataque en las bandas con Castro y Pereira, y en punta con Casadesús, que dispuso de alguna ocasión que no aprovechó y finalizaba la primera mitad con ventaja local.

Tras la reanudación, el partido cambió por completo. Aouate fue expulsado con roja directa por derribar a Rui Fonte, en un balón disputado fuera del área y el Mallorca se quedó con diez. En el saque de falta Weiss, el mejor del partido, lanzó el balón al palo y en el rechace Rodríguez -solo sin portero- no acertó a golpear el balón y se perdió una oportunidad magnífica de ampliar la distancia.

Con uno menos, el equipo mallorquín disfrutó de los mejores minutos del partido y metió al Espanyol dentro de su área, pero no supo aprovechar las oportunidades. Conforme pasaron los minutos los blanquiazules controlaron el choque y acabaron venciendo por la mínima en un partido en el que los visitantes merecieron más.