Predijo hace 36 años que el terrorismo etarra lanzaría dos ofensivas: “Una de terror para desmoralizar y otra de penetración ideológica táctica, con el propósito de engañarnos”. No importa que las predicciones lanzadas por Blas Piñar López entonces se estén cumpliendo a rajatabla. De hecho, la estigmatización de las ideas que él ha defendido siempre formarían parte del proceso de demolición de España que se puso en marcha a inicios de los años 70 y que siempre ha denunciado.

En cualquier otro país con apego a la verdad, las opiniones de Blas Piñar tendrían la solvencia política y el rigor moral que aquí en cambio se le ha negado siempre. Tal vez por eso, AD ha conversado con él sobre el anuncio del “abandono” de la acción armada por parte de ETA, en la certeza de que en sus apuntes hallaremos las claves que nos aproximen más a la verdad y menos a la palinodia oficial de estos días.

De entrada, el ex líder de Fuerza Nueva cree que el citado anuncio de ETA es el resultado de un pacto de los terroristas con PSOE, PP y PNV. “La semilla ha terminado dando sus frutos y a través de esos frutos podemos descubrir el árbol”, señala el veterano político mientras rememora algunas de las inquietantes afirmaciones realizadas por Manuel Fraga al inicio de la transición, un periodo que Piñar considera clave para entender el desarrollo de los acontecimientos que vive España. “Primero dijo que el mejor terrorista era el terrorista muerto. Luego declararía que la llegada de los socialistas al poder equivaldría a la invasión de los bárbaros. Sin embargo, los bárbaros llegaron al poder y eso no ha impedido al PP pactar con ellos en las Vascongadas e incluso seguir manteniendo ese pacto tras conocerse los contactos entre ETA y el PSOE”, enfatizó el político, escritor y notario.

El fundador de Fuerza Nueva dice estar convencido de que “los etarras van a condicionar la vida política española a partir de ahora”. Y lanza una advertencia que a su juicio añade dramatismo al nuevo escenario. “ETA tiene ahora el suficiente apoyo financiero como para que no tenga que recurrir al impuesto revolucionario”.

Blas Piñar denuncia que el consenso entre PSOE y PP prueba de forma terminante que el pacto con ETA “existe y ha existido siempre”. En este sentido, se dirige al ex ministro Mayor Oreja para reclamarle que lance ahora contra su partido las reconvensiones que acostumbra hacer al resto de fuerzas políticas. “Las denuncias de Mayor Oreja contra otros partidos valen también para el suyo. No entiendo que este señor no haya dado ya un puñetazo contra la mesa y se haya marchado del PP”.

Todo lo anterior sirve a Blas Piñar para apuntalar la tesis que ha defendido siempre: que la llamada transición no fue fruto de ningún consenso político sino el resultado de los planes elaborados “por personas muy inteligentes” para el debilitamiento progresivo de España hasta su total destrucción. Sostiene al respecto que “algunos párrafos importantes” de ese siniestro guión quedan aún por escribir y nos desgrana algunas claves que adelantaremos a los lectores en próximas ediciones.