Tres zarpazos en la primera parte de un Athletic de Bilbao más contundente que convincente sirvieron para doblegar la resistencia de Osasuna (3-1), en el encuentro que cerraba este lunes la octava jornada de la Liga BBVA en San Mamés, donde el equipo rojiblanco ha sumado su segunda victoria liguera del curso.

Pese a que el partido dura hora y media, en esta ocasión todo lo importante quedó encapsulado en un cuarto de hora, en los quince minutos previos al descanso que el Athletic empleó para despedazar a su rival con una oleada ofensiva para estampar tres goles en las redes de Andrés Fernández.

Osasuna empezó incomodando a su rival de la mano de un buen Lamah que, en paralelo con su equipo, se fue desquiciando y acabó expulsado en la segunda parte. El sistema de Marcelo Bielsa no encajaba bien en la maraña navarra y los ‘rojillos’ incluso rozaron el gol con un tiro de falta de Nekounam bien despejado por Iraizoz. Sin embargo, a la media hora todo cambió. Sin hacer nada reseñable hasta ese momento, los ‘leones’ se desataron con tres ataques que encontraron el éxito. Primero fue Muniain (min.29), aprovechando con eficacia una asistencia desde el suelo de Llorente; después le tocó a Gabilondo (min.37), que fusiló un balón suelto en el área pequeña; y finalmente se lució Javi Martínez (min.46), rematando de cabeza un centro enroscado de Iraola desde la banda derecha.

La contundencia del Athletic mató a su rival y también al partido, condenado a una segunda parte anodina, con el equipo local pensando en el partido del jueves ante el Salzburgo y el visitante mascullando su mal fario en la Catedral, donde no puntúa desde hace más de cuatro años. Un extraño penalti cometido por Javi Martínez en el último suspiro permitió a Nekounam maquillar el marcador.