GP de Japón.- Vettel se proclama campeón del mundo de Fórmula 1
Lo ha conseguido. En la decimoquinta carrera de la temporada, en el trazado que coronó a leyendas como James Hunt, Ayrton Senna o el propio Michael Schumacher, Sebastian Vettel se ha proclamado campeón del mundo de Fórmula 1 por segunda vez en su vida, de manera consecutiva, y alzándose con un nuevo récord: el de ser el más joven en lograr dos títulos.
Lo ha logrado en un Gran Premio de Japón que ganó Jenson Button y en el que Fernando Alonso acabó segundo, tras una prueba que ha tenido emoción hasta el final, no exenta de polémica y que puede servir como resumen de lo que estamos viviendo esta temporada de Fórmula 1. El de McLaren ha logrado quitarse una espinita: ganar una carrera en seco, algo que no había conseguido fuera del BrawnGP de 2009.
La prueba nipona comenzó con polémica. Desde la pole, Vettel arrinconó a Button en la salida, llevándole incluso hacia la hierba. El inglés salvó la situación, y aunque los comisarios decidieron investigarlo, el alemán se libró de una sanción que, en otro contexto, quizá le hubieran endosado sin pensarlo. A diferencia de otros pilotos, que habrían montado en cólera, Button volvió a demostrar que es un auténtico ‘gentleman’ británico y bromeó con Vettel cuando acabó la carrera: “¿es que no me has visto en la salida?”. Una demostración de deportividad.
Massa vs. Hamilton. Otra vez
Por detrás, Fernando Alonso acababa a las primeras de cambio con un Felipe Massa que, posteriormente, volvería a ser protagonista involuntario con su ‘viejo’ enemigo Lewis Hamilton. La primera ronda de paradas en boxes fue determinante, tal y como avisaba Alonso en la jornada de clasificación. En McLaren realizaron una parada perfecta y, cuando se estabilizó la prueba, tenía a Vettel por detrás y a Alonso en tercera posición. Cuando Button comenzaba a ganar segundos sobre el Red Bull, Massa y Hamilton provocaban que los comisarios de carrera tuvieran que volver a ponerse a trabajar.
El inglés cerró sutilmente al Ferrari en una curva y se tocaron; el trozo de pieza que salió del alerón delantero de Massa acabó en medio de la pista y los comisarios decidieron hacer salir al ‘safety car’ para evitar un accidente. Esta vez, ni Massa ni Hamilton fueron penalizados.En la última parada en boxes, cuando todos montaron el juego de neumáticos medios, fue cuando la emoción se hizo más patente.
En la vuelta 34 de las 53 que se dieron, Red Bull apostó por una estrategia conservadora y no esperó a ver qué hacían sus rivales, sino que mandó entrar directamente a Vettel y a Webber a la vez, para asegurarse de llegar en buenas condiciones a la recta final de la carrera. Si los blandos duraban poco más de seis vueltas a su máximo rendimiento, los medios podían tirar hasta final de la prueba, y maximizar los puntos de la escudería es fundamental para el título de constructores para el que, también, son claros favoritos.
A Alonso le falta una vuelta
Vettel no tenía más que puntuar, y aunque lo intentó, no pudo pasar a un Fernando Alonso que cuajó una recta final de carrera digna de poner en todas las escuelas de pilotaje. El español dejó ver por qué está considerado uno de los pilotos más completos de la parrilla en esta carrera, y no sólo por tirar de un Ferrari que no está a la altura de lo que se espera, y menos en un trazado en el que, en teoría, no iban a ir tan bien, sino porque también en dificultades sabe cómo aguantar la posición.
A sabiendas que Vettel no iba a arriesgarse a no acabar la prueba, lo que supondría un vergonzante aplazamiento de su alirón, Alonso se dedicó a neutralizar los ataques del alemán, que ni con DRS pudo pasarle.Desde el muro, ordenaron a Vettel que se conformase con el tercer puesto, y a Webber, que venía cuarto, que no atacase a su compañero. El resultado de ambos era óptimo y Christian Horner y Adrian Newey no querían que se les escapase un título que ya tenían en la mano.Aprovechándose de esta situación, y viendo que, inesperadamente, el neumático medio le estaba funcionando a las mil maravillas, Fernando Alonso apretó para intentar arrebatarle la victoria a Jenson Button. Ambos luchan por el subcampeonato, y a falta de cuatro carreras, quedar primero o quedar segundo es vital.
Pese a que el McLaren tuvo que reducir el ritmo por problemas con el consumo de combustible -llegó tan justo a meta que se le quedó parado el coche a unos metros de la línea de salida-, y a que Alonso le recortó varios segundos en las últimas cinco vueltas, el español entró finalmente segundo. De haber durado la carrera una vuelta más, y visto el ritmo que ambos tenían, es más que probable que el español hubiera podido pasar al inglés.Por detrás, cabe destacar la actuación de Sergio Pérez. El mexicano está haciendo méritos para que Ferrari cuente con él como sustituto de Massa de cara a 2013 -en 2012 todo apunta a que el brasileño mantendrá su contrato- y acabó octavo, justo detrás del piloto titular de la Scuderia. Además, por sólo una milésima, no se llevó la vuelta rápida de carrera.
Además, durante unos instantes y gracias a las paradas en boxes, Michael Schumacher volvió a sentir lo que es liderar una prueba de Fórmula 1 cinco años después, precisamente, también en Japón. Jaime Alguersuari, por su parte, cuajó una carrera muy regular y acabó en 15ª plaza, mientras que su compañero Sebastian Buemi no acabó por culpa de un neumático mal puesto, que le hizo abandonar.Suzuka vivió este domingo la fiesta de Red Bull. Ahora afrontamos cuatro carreras en las que Sebastian Vettel tiene la oportunidad de aumentar sus récords por pura diversión. La competición por el segundo puesto de la clasificación, queda en manos de Alonso, Button y, en menor medida, Webber y Hamilton. Próxima parada, Corea este mismo domingo, donde Fernando Alonso ganó el año pasado.