El presidente de Plataforma per Catalunya (PxC), Josep Anglada, ha expresado hoy su preocupación por las “alarmantes” cifras alcanzadas por la inmigración en España, lo que a su juicio compromete muy seriamente el futuro de nuestra identidad colectiva. “Aunque los datos suelen ser opacos y los números se presentan maquillados y atenuados, en España hay unos 6.000.000 de extranjeros, a los que hay que sumar el millón largo de inmigrantes nacionalizados tras varios años de residencia legal. Eso significa un total de más de 7 millones de extranjeros; es decir, más del 13 % de la población que vive en España es extranjera o de origen extranjero. Esto sólo tiene un nombre: invasión”, alertó Anglaga.

El líder de los identitarios españoles recordó que este “aluvión migratorio” se produjo “en el breve lapso de quince años”, lo que en su opinión representa “un fenómeno de invasión demográfica sin precedentes en la Historia”. De cara a las elecciones del 20-N, Anglada cree imprescindible que los electores se pregunten “cuándo empezó este disparate y quién fue el culpable”. Su respuesta es concluyente: “En 1996 con la llegada al poder de José María Aznar, la cifra de extranjeros era de 1.6%, casi todos jubilados provenientes del norte de Europa y al final de su mandato superaba el 6% de inmigrantes procedentes del tercer mundo. El catastrófico modelo económico del PP, basado en la especulación del suelo y en la construcción, necesitaba obra de mano barata, y Aznar y su entonces ministro de Interior, Mariano Rajoy, dieron todas las facilidades para que entrara la mayor cantidad posible de inmigrantes”.

El vicense extrapola también en el PSOE y otras formaciones ‘palmeras’ la responsabilidad de los devastadores efectos que ha tenido la inmigración: “Si el PP fue el encargado de abrir la puerta a los inmigrantes, el PSOE se dedicó a ponerles la alfombra roja. Ya con Zapatero en el poder, durante 2004, España fue el destino del 20% de todos los inmigrantes que llegaron a la Unión Europea. En 2005 el PSOE, a través del defenestrado Jesús Caldera, tuvo la ocurrencia de proceder a una nueva regularización masiva de inmigrantes que provocó un devastador efecto llamada. Así, en 2007 superábamos los 4 millones, lo que nos convirtió en el segundo país que más inmigración recibió de todo el mundo. El zapaterismo ni siquiera fue capaz de parar la avalancha migratoria en los años de la crisis, y a pesar del aumento del paro y de la precariedad por la que atraviesan miles de familias españolas, en 2008 llegaron a España 400.000 inmigrantes más, cifra que ascendió hasta los 520.000 en 2009”. Y añadió: “PP y PSOE han contado con la colaboración permanente de CiU, de ERC y de IU-ICV, entre cuyos deméritos está el haber logrado que el porcentaje de inmigrantes sea todavía mayor en Cataluña que en el resto de España y que la presión migratoria suponga un agobio constante para la sociedad catalana”.

Por último, el presidente de Plataforma per Catalunya señala que su formación política es la única que propone “una alternativa real y concreta” al problema de la invasión extranjera. “El PP, el PSOE y el resto de partidos con representación parlamentaria tienen una misma y única política migratoria, que deberíamos considerar suicida”. A su juicio, ello ha provocado “pobreza, marginación, inseguridad, injusticia, competencia desleal, caos en el sistema sanitario y social…”.

“Se acercan las elecciones del 20-N y sólo hay dos opciones: la de seguir en la catastrófica dinámica actual o la de parar la invasión, deteniendo primero y revirtiendo después el flujo migratorio, repatriando a los inmigrantes. La primera opción la representa toda la casta política, la segunda sólo Plataforma per Catalunya. Por eso es de vital importancia que logremos un escaño en las próximas elecciones y que nuestra postura sea defendida en el Congreso de los Diputados y, por consiguiente, en toda España”, remachó Anglada.