Dibujo central del último cartel taurino de La Monumental, diseñado por Miquel Barceló.

Las taquillas de la plaza de toros de La Monumental de Barcelona y las oficinas del coso ubicadas en la calle Muntaner han agotado las entradas puestas a la venta para ver torear este domingo a José Tomás, Juan Mora y el catalán Serafín Marín, la última corrida de toros de la historia prevista en Cataluña.

La mayoría de las entradas ya se habían comprado en formato de abono para los dos días incluidos en las Fiestas de la Mercè, que se pusieron a la venta el día 5, si bien las de un solo día que se habían puesto a la venta este mismo martes se han agotado en cuestión de minutos.

A partir de las 11.00 horas del mismo día de la corrida se pondrán a la venta el 5% de pases que el coso está obligado a reservar, aunque ello no impedirá que José Tomás vuelva a llenar las 18.000 localidades de las que dispone La Monumental.

El ritmo de venta de los abonos hace presuponer que la corrida del sábado, en la que Morante de la Puebla, José María Manzanares y El Juli torearán astados de la ganadería de Núñez del Cuvillo, también venderá la mayor parte de las localidades.

De este modo, La Monumental volverá a llenarse dos años después – la última vez que lo hizo también toreó José Tomás -, y presentará un aspecto inmejorable en la última corrida prevista en la historia taurina de Catalunya, tras la prohibición decretada por la mayoría del Parlament a aplicarse a partir de 2012.

Los abonos se pusieron a la venta con precios comprendidos entre los 44 y los 244 euros, mientras que las entradas para un solo día se han puesto a la venta este mismo martes con precios comprendidos entre los 22 y los 122 euros, según la zona.

A pesar de ello, según ha podido comprobar Europa Press, las entradas de sombra que se vendían en la zona de tendido por un precio alrededor de los 60 euros ya alcanzan los 200 euros en la reventa, a cinco días de la corrida.

El matador de Galapagar (Madrid) toreará en Barcelona después de recibir en abril de 2010 una cornada que le ha mantenido alejado de los ruedos durante más de un año, en lo que supone su regreso a la capital catalana, uno de los lugares en los que goza de mayor ascendencia.

El diestro está emocionado ante su inminente regreso a La Monumental, si bien también siente “pena” porque se trata de la última corrida prevista en Catalunya, según explicó su apoderado Salvador Boix este lunes.

Boix reseñó que Tomás siente “como todos los toreros y como todos los aficionados” la prohibición decretada por la mayoría del Parlament, y que supone que a partir de enero de 2012 no vuelva a celebrarse ninguna corrida en Catalunya, si bien se han mantenido los tradicionales ‘correbous’.

Por su parte, la Escuela Taurina de Cataluña ha explicado que el diestro ha efectuado “un importante donativo” que asegura que este centro continúe funcionando el próximo año, a pesar de que la escuela no cuenta con apoyos ni subvenciones de ningún tipo, ha reseñado un comunicado.

Durante 2011 La Monumental habrá celebrado diez corridas de toros, una de rejones y seis novilladas, si bien los últimos datos conocidos de público asistente se remontan a 2009, cuando acudieron al coso alrededor de 140.000 personas.