Rubel Kaplan/Especial para AD.- Acicateada por el éxito y repercusión internacional de Wikileaks, Al Jazeera, la emisora de televisión por satélite de lengua árabe fundada en noviembre de 1996 por el gobierno de Qatar y principal canal de noticias del mundo árabe- que cobró fama en Occidente como sitio de difusión privilegiado de los mensajes de Osama bin Laden y otros miembros de la red Al Qaeda- emulando a Julian Assange, anunció con el pomposo título de ‘Al Jazeera Transparent Unit (AJTU), su objetivo de “movilizar a su audiencia para presentar a través de todas las formas de contenido, documentos, fotos, clips de audio y video para su revisión editorial y poder así difundirlo y transmitirlo de forma online en nuestras emisiones en inglés y en lengua árabe”.

Al Jazeera afirma que cualquier documento que reciba será sometido a un riguroso proceso de autentificación para así respetar el auténtico “periodismo de investigación” y que protegerá la privacidad de sus proveedores de información, redactando profesionalmente su contenido. “Los archivos se cargan y almacenan en nuestros servidores y sólo acceden a ellos los periodistas que trabajan para Al Jazeera Transparent Unit”.

Al Jazeera ya ha publicado su primer compilado de dudosa verosimilitud llamado ‘Los papeles palestinos’, cerca de 2.000 documentos internos (correos electrónicos, notas, etc.) sobre una década de negociaciones entre el Gobierno israelí y la Autoridad Nacional Palestina (ANP) de los que ya se han hecho eco periódicos como el británico The Guardian. De acuerdo al material revelado se puede colegir como primera conclusión, que el informe socava a Mahmoud Abbas, presidente de la Autoridad Nacional Palestina, presuntamente más dispuesto a consensuar la paz con Israel, a favor del movimiento terrorista Hamas que gobierna en la Franja de Gaza y se opone a cualquier tipo de negociación y reconocimiento del Estado judío.

En las “filtraciones” que publicó Al Jazeera se aseveró que Mahmoud Abbas, el negociador jefe de los palestinos Saeb Erakat y el ex primer ministro de la ANP Ahmed Qurei habían renunciado a los derechos de árabes e islámicos a Jerusalén y al Monte del Templo o el Haram al-Sharif como lo denominan los musulmanes y que Abbas y su dirigencia habían capitulado en relación a la cuestión del retorno de los refugiados palestinos y enfatizan las supuestas evidencias de colusión entre la ANP e Israel para desarmar a un futuro Estado palestino. Asimismo se consigna que Erekat se había quejado a EE.UU. por no hacer éste lo suficiente para bloquear los túneles que van desde Egipto hasta la Franja de Gaza y evitar el contrabando de armas y víveres. También se cita la presunta renuncia de los palestinos a los asentamientos judíos de Jerusalén Este, excepto el bloque de Har Jomá -próximo a Belén-, así como los barrios judío y armenio de la ciudadela antigua de la ciudad santa.

A pesar que Saeb Erekat declaró que lo trascendido en los “documentos secretos” se trata de “mentiras fabricadas con medias verdades” y “calumnias” instigadas contra los líderes palestinos, el daño y erosión que causó lo publicado por Al Jazeera y reproducido por The Guardian a la Autoridad Nacional Palestina es inconmensurable y va en detrimento de la esperanza de mantener el proceso abierto hasta septiembre de 2011, fecha en la que según había conjeturado Barak Hussein Obama, Palestina debería ser un Estado independiente.

Sin embargo, después de que la agencia de noticias palestina independiente “Maan” informara en base a fuentes “bien informadas” que los documentos fueron robados de las oficinas de Erekat, éste confirmó el 27 de enero la información. “Si, los documentos fueron robados de los ordenadores de la oficina del Departamento de Negociaciones de la OLP”, reconoció Erekat a la emisora “Voz de Palestina”, a la que adelantó sus planes de demandar a Al Jazeera e insistió en que la cadena de televisión debe mostrar el contenido de todos los documentos que presuntamente dice que son secretos y aseveró que lo que ha hecho “supone una vergüenza sin precedentes en la historia del mundo árabe”. Fuentes del Departamento de Negociaciones de la OLP dijeron a EFE que se investiga el origen de las filtraciones. “El liderazgo palestino trabajará para destapar los regímenes que están detrás de este complot. Todos nos hemos percatado que esa cadena de televisión es selectiva y todo lo que se ha escrito sobre Jerusalén y los refugiados no son más que dos papeles”, concluyó Erekat.

En Israel lo difundido por Al Jazeera suscitó dispares reacciones. El primer ministro Binyamin Netanyahu y funcionarios gubernamentales, optaron por el mutismo y se abstuvieron de comentar las fugas de Al Jazeera que publicó The Guardian, pero eso cambió el miércoles 26 por la tarde cuando Gilad Arden el Ministro de Protección Ambiental, hablando en el pleno de la Knesset como representante oficial del Gobierno, elogió a lo que los dos medios de comunicación llaman los “documentos de Palestina”.

“Cuando las fugas Al-Jazeera revelaban lo que estaban dispuestas a conceder las partes israelíes y Palestina, lo leí como una gran bendición. Cuando la verdad sale a la luz, siempre es una cosa buena. En el mérito de revelaciones de Al – Jazeera, sabemos más de la verdad”. Según el Jerusalem Post, Arden se quejó de que en anteriores procesos de paz, los líderes palestinos decían una cosa al mundo y lo contrario a su gente. Dijo ignorar lo que ex líder palestino Yasser Arafat decía a su pueblo en árabe costado miles de vidas. Contrariando a Arden, el diputado por el partido Unión Nacional en la Knesset, Michael Ben-Ari, tildó a Al Jazeera como “servidores de Al Qaeda” y dijo que no debía permitirse a sus reporteros el ingreso al Parlamento.

La cadena Al Jazeera. financiada y sostenida por la familia real qatarí que en sus inicios fue gratuita, se jacta de haberse independizado del gobierno al gradualmente comenzar a cobrar por sus servicios como era su intención primigenia, pero es vox populi que su verdadero dueño es el Emir de Qatar, Sheikh Hamad bin Khalifa al-Thani quien apoya a Irán y a Hezbollah en Líbano. En una entrevista al Financial Times en noviembre de 2010 el emir dijo que Qatar no permitiría a EE.UU. utilizar su base allí para lanzar un ataque contra Irán si decidiera hacerlo y advirtió que son los israelíes “los que tienen las armas más peligrosas, las armas nucleares.” También dijo que las relaciones de Qatar con Irán continuarían y que “nunca hemos pensado apoyar a los norteamericanos contra Irán o contra Hezbollah. De nuevo, creemos que conocemos nuestra región mejor que ellos.”

Algunos funcionarios de la Autoridad Palestina han afirmado que Qatar, que posee Al-Jazeera, ha determinado “liquidar políticamente” a Abbas y su equipo para ayudar a Hamas a extender su control a la Ribera Occidental. Conociendo la habilidad del emir de Qatar para moverse en los volátiles terrenos de Medio Oriente, no sería descabellado elucubrar, que los “Documentos de los palestinos” u otros que los sucederán, sean producto de una formidable acción psicológica tendiente a desestabilizar al desacreditado por la corrupción gobierno de Mahmoud Abbas, en beneficio del movimiento terrorista Hamas, quien juró que nunca reconocerá a Israel.