El fiscal solicita cuatro años y siete meses de prisión, así como diez años de inhabilitación, para una enfermera acusada de acceder al expediente de una paciente, pareja de su excuñado, para que su hermana reclamara al juzgado la modificación del régimen de visitas acordado sobre los hijos del matrimonio.

La paciente había ingresado en el hospital varias veces con ataques de ansiedad e intentos de suicidio, circunstancia que la acusada y su hermana trataron de utilizar en detrimento del hombre, para que el juez suspendiera el régimen de visitas que éste disfrutaba sobre los menores. En su calificación provisional, el Ministerio Público solicita además para la procesada, a la que acusa de un delito de descubrimiento y revelación de secretos, una multa de 6.600 euros. No obstante, absuelve de todo delito a su hermana, divorciada de mutuo acuerdo del hombre, por entender que no resulta probada su participación en los hechos.

El juicio señalado para hoy en la Sección Primera de la Audiencia de Valencia se ha suspendido hasta la semana que viene, tras la solicitud de las partes de aportación de nuevas pruebas periciales. Según el escrito fiscal, a finales de 2008, Selica S.C., de 33 años, aprovechando su trabajo como enfermera del servicio de Urgencias del Hospital de la Ribera de Alzira (Valencia), accedió a los datos de la historia cínica de Sonia V.F. sin su consentimiento.

Los documentos, referidos al estado de salud de la paciente, registraban cuatro ingresos de la mujer en ese centro sanitario, unos “datos reservados” que la enfermera puso a disposición de su hermana, Mónica S.C., exmujer de Luis Enrique M.M., en perjuicio de la intimidad de la afectada. El 24 de noviembre de 2008, Mónica presentó un escrito ante el Juzgado de Primera Instancia número 26 de Valencia , en el procedimiento de divorcio de Luis Enrique, solicitando la adopción de medidas cautelares sobre los hijos habidos en el matrimonio, de 6 y 4 años de edad.

En el documento, instaba a la suspensión cautelar del régimen de visitas a favor del padre, relatando una serie de circunstancias relativas a la “preocupación” que le causaba el hecho de que sus hijos, sobre los que tenía atribuida la guarda y custodia, permanecieran con la actual pareja de su exmarido durante el tiempo que éste disfrutaba del régimen de visitas. El escrito hacía referencia concreta a “diversos ingresos hospitalarios” de la chica en el año 2008 por “ataques de ansiedad e intentos de suicidio”, concluyendo que: “quienes la conocen afirman que tiene trastorno de personalidad”.