La rapidez del proceso sorprendió a todos. El Juzgado de lo Mercantil de Granada ha declarado el concurso de acreedores de Dhul, sólo un día después de que el holding Nueva Rumasa lo solicitara.

El magistrado Blas Alberto González dictaminó así la suspensión de las facultades de gestión propia de la compañía de bandera del grupo que dirige José María Ruiz-Mateos y nombró varios administradores para llevar sus riendas durante el proceso. El juez designó como administradores a dos abogados, a Deloitte -entidad jurídica profesional en auditoría de cuentas-, a un economista y a Endesa, acreedora ordinaria y suministradora de energía y gas de la empresa concursada. Todos disponen de un plazo de cinco días para declarar su disposición o no a participar en el concurso.

El auto aconseja un “control absoluto” de la empresa por parte de los administradores y apartar temporalmente a la actual dirección, pese a que la compañía haya solicitado esta intervención de forma voluntaria. El juez da la razón a los sindicatos y confirma que la situación de insolvencia está relacionada con las deudas de otras empresas de la familia Ruiz-Mateos y no tanto a la gestión de la propia Dhul.

El magistrado explica la “complejidad cuantitativa y cualitativa” del caso y advierte del riesgo de descoordinación. Para ello solicitó un “claro y exacto” reparto de las funciones entre los administradores designados.