Imagen de las '3.000 viviendas', en Sevilla.

Cinco provincias andaluzas se encuentran entre las diez del país que menor índice de convergencia presentan con la Unión Europea, según el último informe Balance económico regional, de la Fundación de Cajas de Ahorro (Funcas). Bien sangrantes son los casos de Granada y Jaén que, desde hace años, ocupan los dos últimos lugares. Pero también es significativo e iluminador que de las 9 provincias españolas que presentan menor convergencia con Europa, nueve hayan estado gobernadas por el PSOE en los últimos casi 30 años.

Las diez provincias más alejadas de las medias europeas son Granada, Jaén, Cádiz, Alicante, Guadalajara, Córdoba, Toledo, Málaga, Badajoz y Albacete. Salvo Alicante, gobernada por el PP en la comunidad y en la diputación provincial, en las demás gobierna el PSOE desde hace casi 30 años. En estas provincias de menor índice de convergencia aparecen cinco provincias andaluzas (Málaga, Córdoba, Cádiz, Jaén y Granada), Badajoz, Toledo, Guadalajara, Alicante y Albacete con índices que no superan el 80% de la media europea.

(Alicante, según Funcas, aparece en una posición irreal a causa del cómputo de una mayor población inmigrante, que vive de las rentas transferidas del exterior y no se computa como renta española. La auténtica posición alicantina deberá estar en torno al 95% del índice de convergencia europeo. Algo parecido ocurre con Baleares y Málaga, provincias muy afectadas ambas por la residencia de extranjeros jubilados).

Como puede comprobarse en el cuadro que sigue abajo, las provincias más desarroladas de España en relación con la convergencia europea, son Alava, Madrid, Vizcaya, Navarra, Guipúzcoa, Gerona, Tarragona, Valladolid, Soria y Burgos. La mayor convergencia provincial, puesm se sitúa en las tres provincias vascas, Madrid, Navarra, en tres catalanas (Tarragona, Gerona y Barcelona), en tres castellano leonesas (Valladolid, Soria y Burgos) y en Zaragoza, todas ellas con un índice superior al 110 sobre la media 100 de la Europa de los quince.

Es interesante comprobar cómo Madrid, sin tener fueros ni cupos, se sitúa en los puestos de cabeza junto a cuatro provincias que disfrutan del privilegio de los fueros. Los casos de Valladolid, Soria y Burgos pueden tener que ver con la población en buena medida.

El mayor desarrollo relativo de las provincias españolas se sitúa en el norte de España, Madrid, Baleares y la costa mediterránea del nordeste español. Es el caso del País Vasco y Castilla y León que, con un escaso crecimiento de su población, logran unos incrementos elevados en su índice de convergencia. En sentido contrario las comunidades autónomas que han registrado fuertes crecimientos de su población ven como su índice de convergencia registra crecimientos bajos, e incluso descensos respecto de sus posiciones en 2000. Andalucía de nuevo está en la penúltima posición, más de 20 puntos por detrás de la media. Cinco provincias andaluzas, (Málaga, Córdoba, Cádiz, Jaén y Granada), son las que registraron menor índice de convergencia en diez años. Tremendo.