Rajoy dice no estar dispuesto a apoyar la reforma de las cajas
El presidente del PP, Mariano Rajoy, asegura que no está dispuesto a respaldar la reforma de las cajas de ahorro, que considera “contraproducente”, y añade que así se lo transmitió al Ejecutivo hace más de una semana y que está esperando su respuesta porque su “preocupación es máxima”.
En una entrevista que publica hoy el Faro de Vigo, el líder de la oposición explica que hay entidades que ya iniciaron su proceso de saneamiento, “que supone disminuir capital”, y ahora se les pide un aumento de capital. Asegura además que los bancos y las cajas deben tener los mismos requisitos y que el proyecto del Gobierno “es discriminatorio” y recalca que “no hay una razón para se pongan requisitos de solvencia del 10%” cuando la norma internacional Basilea III, que entra en vigor en 2019, solo exigirá un 8%.
La ministra de Economía, Elena Salgado, anunció el pasado 24 de enero que, a cierre de septiembre, las entidades que cotizan en Bolsa tendrían que tener un “capital básico”, técnicamente conocido como “core capital”, de al menos el 8% de sus activos ponderados por riesgo. Ese requisito se elevó al 10% para las entidades con una dependencia de la financiación de los mercados mayoristas superior al 20% y que no cotizan o no tienen un socio que controle un porcentaje significativo de su capital. Condiciones que afectan principalmente a las cajas de ahorros. “Mire, el 8% sólo lo exigen ahora en Irlanda y Suiza. Desconozco la razón de semejantes exigencias”, explica.
El líder del PP añade que, dado que el Gobierno “pretende dar seis meses para aumentar el capital”, se corre “el riesgo de que los que entren se hagan con la mayoría de las cajas, y a un precio irrisorio”, lo que “sería nefasto”. Por contra, subraya que, “si no entra nadie, vamos a un proceso de nacionalización” de las cajas y se necesitará más deuda pública cuando “España no está para emitir más”.
Rajoy señala que, si las cajas “consiguen capitalizarse, será a costa de recortar aún más los créditos a familias y empresas”, algo que “no podemos permitir”. “La situación que plantea el Gobierno va a hacer imposible llegar al 10% y provocará que, o bien se tengan que malvender las cajas a precio irrisorio, o que al final acaben nacionalizadas. Todo esto se lo hemos transmitido al Gobierno y estamos esperando su respuesta desde hace más de una semana”, concluye Rajoy.