Otro preso político cubano con graves problemas de salud inicia una huelga de hambre contra la tiranía castrista
En menos de 48 horas otro preso de conciencia del Grupo de los 75, Pedro Argüelles Morán, se declaró en huelga de hambre esta mañana en la cárcel de Canaleta, provincia de Ciego de Avila, según informó su esposa, Yolanda Vera Nerey.
“Es un acto de solidaridad y protesta porque el gobierno cubano no ha hecho nada más”, indicó Vera. “Para mí es algo terrible ya que es un hombre que tiene muchos problemas de salud”.
Morán se suma así a la llamada de Diosdado González Marrero, otro opositor encarcelado, que el martes anunció que comenzaba un ayuno forzado en solidaridad con su esposa, Blanca Alejandrina García de la Riva. La mujer permanece desde el viernes en su casa sin probar alimentos en reclamo de la liberación de éste y otros 10 reos de conciencia.
Morán, de 64 años, padece de artrosis generalizada, sinovitis en ambas rodillas y problemas de la visión. Fue sentenciado a 20 años de cárcel efectiva.
Los restantes presos del Grupo de los 75 han dicho consistemente que no quieren ser excarcelados para luego ser desterrados al extranjero, en este caso a España, a menos que su libertad se tramite sin ningún tipo de condicionamientos.
Ni las autoridades cubanas ni las eclesiásticas han explicado qué les sucedería a los presos políticos que se rehúsen a salir al exterior cuando sean puestos en libertad.