Cientos de miles de egipcios toman las calles de El Cairo al grito de ‘Vete, Mubarak’
Miles de personas procedentes de todos los puntos de El Cairo han comenzado ya a llenar la plaza Tahrir, el epicentro de las protestas contra el presidente Hosni Mubarak, desde donde tiene previsto partir una masiva manifestación para reclamar la marcha del mandatario. Para acceder a la plaza hay que superar hasta tres puestos de control instalados por civiles y militares: en el primero, ciudadanos piden la documentación a los manifestantes; a continuación, soldados cachean a los presentes; mientras que en el tercero, los organizadores de la marcha vuelven a registrar a la gente.
En Tahrir se están reuniendo gente de todas las edades, desde ancianos a niños que acuden acompañando a sus padres, y se agitan banderas y pancartas con lemas como “La gente ha despedido al presidente” o “Mubarak, vete”. Las cadenas de televisión árabes están informando de que ya hay “cientos de miles” de manifestantes: mientras que Al Yazira asegura que ya se ha llegado a “más de un millón” de personas, Al Arabiya mantiene una cifra más prudente y habla de “alrededor de 200.000”.
Mientras, un helicóptero militar sobrevuela la zona y varios tanques del Ejército permanecen apostados alrededor de los accesos de la plaza, donde no se puede ver a ningún agente de la Policía, que fue apartada de Tahrir por Mubarak tras protagonizar la represión de las protestas del pasado viernes. Entre los asistentes, siete hombres vestidos íntegramente de blanco y con bandas también blancas en su cabeza -a la manera de los ‘yihadistas’- gritan en árabe y en inglés: “¡Estoy listo para morir por mi Egipto!”.
Las autoridades egipcias ordenaron anoche el cierre inmediato de las carreteras que llevan a El Cairo y del puerto de Alejandría, en el norte de Egipto, además de la suspensión del servicios de trenes en todo el territorio. Pese a ello, un portavoz de los Hermanos Musulmanes, la principal fuerza opositora del país, ha dicho hoy que miles de miembros de este grupo islámico llegaron anoche desde distintas provincias del país para participar en la manifestación.
La marcha y la huelga general de este martes han sido convocadas por el Movimiento Opositor 6 de Abril, una red juvenil surgida a través de Facebook y cuyo nombre rinde homenaje a los miles de egipcios que apoyaron en abril de 2008, a través de internet, las movilizaciones laborales del Delta del Nilo contra el aumento de los precios. Los manifestantes, tanto en El Cairo como en otras ciudades del país, advirtieron ayer lunes de que los últimos cambios ministeriales no les aplacarán y aseguraron que su principal objetivo es derrocar a Mubarak y deshacerse de todo su entorno.
Histórico comunicado del Ejército
Mientras tanto, el Ejército ha asegurado por primera vez que no empleará la fuerza contra el pueblo egipcio, según un comunicado de la Fuerzas Armadas difundido por la televisión pública. Los militares “nunca han utilizado ni van a utilizar la fuerza contra este pueblo” y afirman que la presencia de soldados en las calles es “para garantizar la seguridad del pueblo egipcio”.
El comunicado agrega que “la libertad de expresión de manera pacífica es aceptable”, aunque “hay que evitar que el país se desestabilice”. En ese sentido, indica que “es inaceptable que los que están fuera de la ley intimiden al pueblo egipcio” y pide a los ciudadanos que “protejan los propiedades públicas y privadas”. Además, el comunicado asegura que “las Fuerzas Armadas son conscientes de las legítimas demandas del pueblo”.
Mubarak se aferra al poder
Sin embargo, Mubarak no se rinde y da un nuevo paso con la intención de demostrar que está de acuerdo con las reformas. El mandatario ha encargado al vicepresidente del país, Omar Suleimán, que abra un diálogo con las fuerzas políticas egipcias para estudiar posibles modificaciones de la Constitución, según ha anunciado este último en una comparecencia televisada.
El recién nombrado vicepresidente, que tomó posesión el pasado sábado, ha añadido que Mubarak le ha encomendado que se cumplan la resoluciones del Tribunal de Apelación sobre las quejas de los resultados de las últimas elecciones parlamentarias “de una manera rápida y honesta”. En el plano económico, Suleimán ha señalado que el mandatario ha pedido a los responsables gubernamentales “tomar medidas para poder recuperar la confianza en la economía egipcia”.
Cada vez más arrinconado, Hosni Mubarak sigue intentando a silenciar las protestas que inundan el país. Esta vez ha fracasado porque de nada ha servido que las autoridades egipcias suspendieran el servicio ferroviario en todo el país. La medida, que los opositores interpretan como un intento del Gobierno de dificultar la gran manifestación de protesta convocada para hoy en El Cairo, no ha impedido que miles de personas se concentren en el centro de la capital para exigir el fin del régimen de Mubarak.