Oscar Quirós Romero, secretario nacional para el Turismo del CDS/ Remitido.- “Si bien es cierto que la Huelga encubierta de los Controladores Aéreos es absolutamente condenable, no es menos irresponsable imponer por Decreto Ley un convenio laboral – que lleva esperando a ser renovado desde 2005 – un día antes del Puente más importante y esperado del año.

En todo caso, el cierre del espacio aéreo español durante más de 24 horas denota un problema mucho más preocupante, como ha sido el colapso total de las carreteras por la falta de previsión ante la ola de frío y la carencia de plazas de otros medios alternativos como la propia RENFE y su venerado AVE.

Por supuesto que los viajeros de avión recuperarán en importe íntegro de sus pasajes, pero… ¿Quién va a compensar las pérdidas a los hoteleros, comerciantes, restauradores, etc. que han visto cómo no llegaban sus pasajeros? ¿Quién a cubrir estas cancelaciones? ¿Cuántas pequeñas empresas del sector servicios van a cerrar el año con pérdidas por sus decisiones?

Hasta ayer, el mundo no confiaba ni en nuestra economía, ni en las medidas que nuestro Gobierno estaba tomando. Desde ayer… tampoco se van a atrever a venir a España a pasar sus vacaciones.

De la vital importancia que supone el sector turístico para el PIB y la escasa importancia que el PSOE le da, ya lo dejaron bien claro con la supresión de la Secretaría General de Turismo el pasado verano. Normas como la ridícula nueva Ley Anti-Tabaco o las salvajes tasas que cobra la SGAE a la hostelería, minan la paciencia del empresario turístico. Golpes como el cierre de espacio aéreo nacional son una nefasta imagen de nuestro país y de la marca turística “ESPAÑA” en el exterior.

Pero el problema de fondo es la obsesión de este Gobierno en “intervenir” en la vida y en las empresas de los ciudadanos. Dedíquense, por favor, a sacarnos cuanto antes de esta crisis cruel y déjense de decidir qué es lo que un español debe o no debe hacer.

Que el problema de los Controladores Aéreos debe ser solucionado, por supuesto. Firmen un convenio y no los manden al Ejército. Que AENA debería ser una empresa privada desde su fundación, es algo obvio. Que somos muchos más los afectados que, únicamente, los usuarios de los aviones… es algo que “sus” telediarios no cuentan a los españoles”.