Una ideología totalitaria contra los hombres: feminismo de género
Magdalena del Amo.- Los movimientos feministas surgidos hacia mediados del siglo XIX han luchado sin descanso por la consecución de determinados derechos que por el hecho de haber nacido con un sexo femenino nos habían sido negados desde la noche de los tiempos. La palabra feminismo se utiliza por primera vez en la revista francesa “La Citoyenne”, a finales del siglo XIX, introducida por Hubertine Auclert. La primera manifestación feminista tuvo lugar en Seneca Falls, Nueva York, en 1848. Se reivindicaba, la igualdad y el derecho al voto.
Las feministas tradicionales llevaron el estandarte de la liberación femenina con reivindicaciones sociales como un salario digno o acceso a profesiones consideradas exclusivamente de hombres.
A finales de los años sesenta, un grupo de feministas radicales empieza a desmarcarse de lo que hasta ese momento había sido el movimiento feminista reivindicativo en todo el mundo. Surge entonces el feminismo político radical cuyo germen hay que buscarlo en la nueva izquierda surgida después de mayo del 68. Este movimiento radical fagocitó ilegítimamente el término feminista “positivo” que hasta ese momento había luchado por los avances de la mujer.
En estos años, las feministas crean grupos “entre” mujeres y “para” mujeres con el fin de debatir sobre sus problemas (hombres, sexo, familia, religión), que hasta entonces habían pertenecido al ámbito privado. Había que transformar lo oculto, los miedos individuales “en una conciencia compartida de su significado, como un proceso social, la liberación de la angustia, la ansiedad, la lucha de proclamar lo doloroso y transformarlo en político”, según palabras de Juliet Mitchel. Otra gran defensora de esta ideología totalitaria es Mary Evans quien defiende que el espacio privado de la familia y el hogar debe ser “sujeto al escrutinio público”. Fue así como lo personal y privado pasa a ser político y público. Estas políticas totalitarias, disparatadas y perversas se han implementado en la sociedad española en los últimos años, a fuerza de leyes y decretos.
El corpus de esta ideología totalitaria incluye el sexo libre, el aborto, y la desaparición del matrimonio, la familia y la religión, por ser instituciones opresoras.
Para las feministas radicales lo femenino y la feminidad debe ser erradicado de la mujer. Todo lo femenino debe ser deconstruido, porque, según la teoría feminista, la mujer es un invento del hombre. El de la izquierda es un feminismo antifemenino que repudia la idea natural de la mujer.
Me llevo mas de una decada de estudio entender que el “feminismo de genero” es sencillamente un tentaculo mas del comunismo masonico globalista. Para llegar a la verdad es necesario hacer un repaso a las biografias de las “ideologas” de los movimientos feministas radicales. Ahi van algunas “perlas”:
Simone de Beauvoir: lesbiana y violadora de menores, expulsada de la docencia por ello, no piso la carcel gracias a sus contactos politicos
Valerie Solanas: lesbiana, drogadicta y prostituta, intento asesinar a Andy Warhol a tiros, hiriendo en un brazo a otra persona
Lidia Falcon: antigua colaboradora de ETA
Y a mi me hace gracia que dicen muchas de ellas que no son supremacistas ante el varón, solo hay que ir a una manifestación de esas radicales y leer pancartas o escuchar gritos al unisono de tipo violento hacia los hombres y no especifican en absoluto a los “supuestos machistas españoles” sino al hombre blanco y heterosexual, algún día se les acabará el vivir de sus chiringuitos adoctrinadores.
Decía Nietzche que el hombre era una cuerda entre el animal (el alma) y el superhombre (el espíritu divino). No vio a estas, a esta repugnante gentuza, más idiota y cretina imposible.
El hombre va desde la mierda subhumana al superhombre.
Que nadie se engañe, las feministas no son más que mierda. Son la subnormalidad con forma de animal-hombre. Un récord negativo.
El objetivo: destruir a la célula fundamental blanca, al matrimonio, con ideas de lo más falsas y demoníacas posibles.
Solo los y las imbéciles se creen a esta gentuza, no hay otro nombre.