Un guardia civil borracho causa un choque con seis heridos al circular en sentido contrario
Un guardia civil destinado en el puerto de Alicante que acababa de salir de trabajar pudo provocar anteanoche una tragedia monumental tras causar un accidente múltiple después de conducir a lo largo de unos diez kilómetros en sentido contrario por la A-31. Eloy L.G.B., de 42 años, dio positivo en la prueba de alcoholemia.
Compañeros suyos del instituto armado lo arrestaron en el Hospital General como presunto autor de dos delitos contra la seguridad del tráfico: uno de conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas y otro de conducción temeraria. No obstante, quedó en libertad con cargos al no existir riesgo de fuga, según fuentes de la investigación.
La colisión, en la que se vieron envueltos seis vehículos, entre ellos un camión de gran tonelaje dedicado al transporte de coches, se saldó con seis personas heridas, incluido el sospechoso. Él mismo y otros dos viajeros sufrieron graves lesiones, mientras que los tres afectados restantes únicamente tuvieron que ser atendidos por contusiones leves. Ayer, el agente y otro de los heridos seguían ingresados en los hospitales de San Juan y Alicante, respectivamente.
Aunque Eloy L.G.B. iba a ser intervenido quirúrgicamente, pudo prestar declaración y alegó inicialmente en su descargo que accedió a la autovía en su sentido Alicante por un «error».
La versión de un simple despiste no parece casar demasiado con las circunstancias que envolvieron los hechos. Para empezar, el conductor tuvo que efectuar un giro de unos 120 grados alrededor de la rotonda de la calle México, en Alicante, para entrar a la A-31 en dirección prohibida. Luego circuló casi 10.000 metros en ese sentido sin detener su Chrysler Voyager, lo que provocó que numerosos conductores que se cruzaron en su camino le lanzaran destellos luminosos para avisarle y alertaran luego al teléfono de Emergencias 112.
Algunos testigos han manifestado que iba con las luces apagadas, pero otros mantienen lo contrario. En la prueba de alcoholemia dio una tasa ligeramente inferior a 0,6 miligramos de alcohol por litro de aire aspirado, lo que habría deparado una simple sanción administrativa de no haber ido acompañada de una conducta presuntamente kamikaze.
El accidente, que no fue una catástrofe de puro milagro, se produjo sobre las 22.07 horas del martes entre el Polígono Industrial de las Atalayas y la pedanía de El Rebolledo y obligó a cortar la autovía en sentido Alicante unas dos horas.
A ese kilómetro 227,2 se desplazaron hasta ocho ambulancias y tres dotaciones del Parque de Bomberos de Elda para atender y, en algunos casos, rescatar de sus coches a los heridos.