Un coronel y un teniente coronel de la Guardia Civil, entre los catorce detenidos por irregularidades en la compra de uniformes
La Unidad de Asuntos Internos de la Guardia Civil ha detenido a un coronel y a un teniente coronel por presuntos amaños en los contratos de uniformes.
Se trata del coronel Juan Antonio Maroto y del teniente coronel Alberto Martín Altube, responsables del Servicio de Contratación de la Guardia Civil, según han informado a Efe fuentes cercanas a la investigación, que han indicado que en la operación Grapa han sido arrestadas otras cinco personas, entre ellas un subteniente del cuerpo.
Esta intervención está relacionada con la llevada a cabo en 2017, cuando fueron detenidas catorce personas, la mayoría funcionarios, por amañar contratos públicos tanto en la Dirección General de la Policía como en la Dirección General de Tráfico (DGT).
De esos catorce detenidos, seis eran funcionarios de la Policía -no todos agentes del cuerpo-, uno de la DGT y otros siete empresarios que se habrían beneficiado de contratos urdidos por una trama que favorecía adjudicaciones a cambio de dinero o pagos en especie.
Ocho registros
Tras esa operación de 2017, la Fiscalía Anticorrupción siguió con las pesquisas. También la Unidad de Asuntos Internos de la Guardia Civil investigó estos hechos y detectó diversas anomalías que han llevado al arresto de estos mandos del cuerpo.
En el marco de esta operación, desarrollada este miércoles, se han efectuado ocho registros, la mayoría de ellos en la Comunidad de Madrid, practicados por Asuntos Internos por orden de la Fiscalía Anticorrupción y del Juzgado de Instrucción número 50 de Madrid, según las fuentes consultadas.
Las pesquisas de los investigadores se centran en el presunto amaño de concursos públicos en la Dirección General de la Guardia Civil, donde un grupo de funcionarios presuntamente habría actuado en connivencia con empresas que resultaban beneficiarias de adjudicaciones de diversos contratos, entre ellos de uniformes del cuerpo.
Los hechos investigados podrían ser constitutivos de presuntos delitos de organización criminal, tráfico de influencias, malversación, fraude a las administraciones públicas, negociaciones prohibidas a funcionarios públicos, prevaricación, cohecho y blanqueo de capitales, según las fuentes.
¡Cómo está la Benemérita!
¿Hasta ahí llega la podredumbre moral que impera en esta Ex España nuestra…?
“El hornor… o las camisas”
…. ha contaminado incluso a los probos funcionarios de toda la Admón. Central del Estado, incluida la G. C.
Desde 1980 hasta la fecha han modificado el la Ley de Contratos del Sector Público unas 10 veces. Siempre para empeorar y dejar nuevos agujeros por donde introducirse los “expertos” para sortear o aprovechar cualquier resquucio legal y así amañar o teleadjudicar miles de contratos de suministro y de obras por la vía subrepticia. Si volvieran a implantar los textos legislativos en estas materias (convenientemente adaptados a lS actuales circunstancias) de 1975, se acababanod problemas de fraude y corrupción en estas adjudicaciones ¿Por qué será que entre 1950 y 1980 no había el menor caso de fraude en la aplicación… Leer más »
Poderoso es don dinero a veces un gran caballero y a veces la mayor perdición
¡Ya ni de la guardia cvil nos podemos fiar…!
O sí, pues al menos le shan detenido, y supongo serán investigados, E IRÁN A JUICIO.