Crítico, contundente y lleno de reproches. El líder del PP, Pablo Casado, subió a la tribuna de oradores recriminando al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez su mala gestión, su “nueva normalidad” y sus escaladas con fases, un “sudoku” del que se enteraron por el “Alo presidente” y que catalogó como “una ruleta rusa” ante la falta de test donde los infectados asintomáticos puedan contagiar al resto sin saberlo.

Casado volvió a exigir a Sánchez que diga la verdad; o si no, le advirtió de que le pasará como a “Zapatero y sus brotes verdes”. “Sus explicaciones son más propias de un curandero que de un comité de expertos”, le dijo. Le echó en cara que diga que no tiene un plan “B” y dudó incluso de que tuviera un plan “A”. Frente a la amenaza del presidente del Gobierno de que si no se apoya la prórroga o será el caos, el líder de los populares recordó la mítica viñeta de Ramón en Hermano Lobo para espetarle: “¿Qué es el caos? El caos es usted”. “España no puede seguir viviendo en la excepcionalidad ilimitadamente”.

“Usted exige mantener poderes absolutos, lo contrario que pasa en países desarrollados”, dijo el líder del PP. Ante esto, repasó lo que han hecho el resto de países europeos. Apuntó que en Francia aprobaron una ley orgánica, en Alemania una ley federal contra infecciones, en Italia un decreto sin acudir a la excepción constitucional. Ni Austria, Bulgaria, Croacia, Dinamarca, Grecia, Noruega, Holanda, Suecia “la han aplicado”. Destacó que Rumania, Chequia, Finlandia, Portugal o Irlanda, que habían aplicado esta norma excepcional, “ya la han levantado” y solo quedan tres países que la mantienen sin concretar su fin: Hungría y Polonia y España. Por ello, Casado le recriminó al Gobierno que “parece instalado en el absolutismo del después de mí, el diluvio” y que prefiera gobernar en “la unilateralidad o en el zoco de prebendas a última hora”.

El líder del PP aseguró que el estado de alarma tenía sentido al principio, para frenar el colapso sanitario, pero “no se puede alargar indefinidamente cuando la Constitución restringe a 60 días el estado de excepción”,y por tanto, a menos días el estado de alarma y le advirtió de que lo que está llevando a cabo es un estado de excepción “encubierto”. Recordó a Sánchez que lleva gobernando por decreto desde que ganó la moción de censura y “ahora lo que pretende es gobernar por órdenes ministeriales incluso para limitar libertades fundamentales” lo que tildó de “inaceptable” y un “fraude de ley”. Asimismo, criticó que abuse de la contratación pública opaca, que para contentar a sus socios modifica el reglamento de indultos, la despenalización de injurias a la Corona, que aumente el número de altos cargos o que introduzca en un decreto para contentar a sus socios modificando la comisión del CNI, así como la modificación de los plazos de instrucción judicial o para cuestionar el derecho de propiedad de las viviendas.

También tildó como “inaceptable y falso”, la amenaza del Gobierno de dejar sin ayudas a los parados si no se aprobaba el estado de alarma, de tomar “como rehenes a parados, autónomos y estudiantes” y apuntó a que ya aplicó un plan “B” antes del estado de alarma cuando cerró colegios y universidades o permitió el confinamiento en Igualdada y Haro. “Pero está más cómodo con el cesarismo del plan A”, afirmó el líder del PP.

También se refirió a la “imprevisión dolosa” de la gestión y le reprochó al reparto de bulos y culpas desde el Gobierno y sus socios si no vota “sí”. “No se parapete en el disfraz de falso moderado, ya no engaña a nadie, ni a sus socios. Si quiere abrir el capítulo de responsabilidades, adelante, porque usted ha fallado en todo y a todos” y le recordó las denuncias interpuestas por sanitarios y fuerzas de seguridad contra el Ejecutivo.

Leyes básicas frente al estado de alarma

Casado recriminó a Sánchez que tampoco dice la verdad sobre las medidas legales para gestionarla.

Le recordó que, con el actual ordenamiento jurídico se puede mantener el mando único sanitario y la limitación de movilidad “sin alargar una excepcionalidad abusiva” como pretende el Gobierno.

En este punto, esgrimió hasta seis leyes, un reglamento, una sentencia del TSJ de Madrid y dos normas internacionales con las que le demostró que se puede actuar sin más prórrogas del estado de alarma. Entre ellas citó la Ley de Medidas Especiales en Materia de Salud Pública, la Ley General de Sanidad, la Ley de Cohesión y Calidad del Sistema Nacional de Salud, la Ley General de Salud Pública, una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, la Ley del Sistema Nacional de Protección Civil, la Ley de Seguridad Nacional, el Reglamento Sanitario de la OMS y el Convenio Europeo de Derechos Humanos. “Existen normas sin tener que recurrir a la norma de excepción”, incidió.

Además, acusó al Ejecutivo de haber sobrepasado reiteradamente la limitación de derechos y de aplicar un estado de excepción encubierto. “No se puede mantener la arbitrariedad del Gobierno de un estado de excepción”. En tiempos de engaño universal, decir la verdad se convierte en un acto revolucionario, le dijo.

Motivos de la abstención

El líder del PP aseguró que su “lealtad no es con su Gobierno sino con los españoles, por ello anunció que el PP no apoyará la prórroga del estado de alarma”. Los populares apostaban por evitar el voto en contra si el Ejecutivo mejora la coogobernaza, si lo desvinculaba de las ayudas económicas y, destacó, “su nueva geometría variable le ha obligado a esas tres condiciones y aceptar el luto nacional”. Por estos motivos el PP se abstendrá, pero si no encuentra un plan “B”, “no vuelva a pedir lealtad y unidad a la oposicion”.

Casado criticó que el Gobierno ahora pretende que todos “desarrollemos una especie de síndrome de Estocolmo por que nos deje salir a tomar el vermú”, criticó su “retoria bélica ya parece más un chiste de Gila, que produciría hilaridad si no fuera por el drama que acompaña a su estrepitoso fracaso de gestión” y exigió que “deje de usar a los españoles como los perros de Pavlov y deje de jugar a prueba y error”.