Jamón serrano: producto emblemático de la gastronomía española
En las grandes celebraciones, tapeos o en bocadillos, el jamón ibérico se hace presente en los restaurantes, cocinas y despensas de toda la península ibérica. A lo largo de los años se ha convertido en un producto icónico y emblemático, que representa a España en las mesas de los gourmets y foodies de todo el mundo.
Ya en el siglo II a.C., crónicas y recetas de personajes célebres e históricos como Catón, Plinio el Viejo o Columela comprueban que desde la antigüedad los pobladores ya eran expertos en la crianza, elaboración y proceso de curado de estos productos provenientes de los cerdos ibéricos.
Exquisita tradición ancestral
En la actualidad aparecen a diario productos gastronómicos “disfrazados” de tradición, que intentan complacer a los comensales que gustan comer bien.
Los jamones serranos son productos que están muy por encima de estas supuestas novedades, ya que se trata de artículos culinarios de tradición ancestral, como lo demuestra un jamón fósil encontrado en un yacimiento arqueológico en Tarragona (antigua Tarraco).
Un entorno ideal para la crianza del cerdo ibérico
Los Pedroches es una comarca que se caracteriza por tener las dehesas más adecuadas para la crianza del cerdo ibérico, animales que se alimentan a base de bellotas que caen de las encinas centenarias que llenan este ecosistema, que sirven de espacio ideal para que se implemente la elaboración de sus productos.
Honrosa Denominación de Origen
El jamón serrano es considerado una joya gastronómica y su estrella principal es conocida como Jamón Ibérico de Bellota, que ostenta la Denominación de Origen Los Pedroches
Esta denominación, bajo la supervisión y tutela de los hermanos Rodríguez Barbancho y la marca Sierra Morena, ofrece la mayor garantía de autenticidad de este producto muy apreciado en las mesas internacionales.
No hay nada más español que las tapas de jamón ibérico
El concepto “tapa” se ha convertido en un término inherente a la deliciosa gastronomía española, una palabra que se remonta a la Edad Media y al reinado de Alfonso X, cuando un médico le recomendó tomar vino, “tapando” el efecto embriagador con pequeñas raciones de comida.
Las deliciosas categorías que ofrecen
Entre los diversos tipos de jamones serranos se distinguen diversas categorías, como son:
Reserva
Son productos de alta selección que incluyen la serie Platino, producto de calidad que garantiza una curación mínima de 24 meses y la serie Azabache, considerada como la selección preferida de los gourmets que degustan un producto curado por un tiempo que supera los dos años.
Ambas en el clima adecuado que prestan sus bodegas y las manos expertas de los profesionales que los elaboran.
Reserva Duroc
Elaborado con cerdos de capa blanca, que se alimentan de pasto natural y cereales en el entorno de Hinojosa del Duque, un lugar privilegiado donde se crían los cerdos que producen los jamones de la mayor calidad.
Todo bajo un proceso lento de maduración y curación, que se expresa en la esencia del sabor emblemático de la península, ofreciendo un resultado de sabor sin igual que complace a los más exigentes.
Gran Reserva
Unas de las características más valoradas por los gastrónomos es que estos jamones serranos no tienen gluten ni lactosa, lo que favorece a algunos comensales que padecen intolerancia a estos componentes.
Estos jamones sólo están preparados con la exquisita carne del jamón de cerdo y sal marina de primera calidad.
Bodega
Elaborados bajo un proceso de curación que supera los 14 meses y en algunos casos pasa por unos cuantos meses más. Provienen de cerdos de capa blanca que viven en completa libertad en las dehesas de los plácidos valles, alimentados de bellotas en un entorno completamente natural.
Los Jamones Ibéricos
Considerado el producto más vendido, con su D.O. Los Pedroches, y un peso aproximado de 7 a 8 kilos.
Ofrecen un jamón serrano,el Jamón ibérico de cebo, que tiene un 50 % de raza ibérica y está destinado para los presupuestos menos amplios y paladares no tan exigentes.
Las Paletas ibéricas
Productos que provienen de las patas delanteras en lugar de las traseras del cerdo ibérico, con un peso aproximado de 4 a 5 kilos y una honrosa Denominación de Origen los Pedroches. Igual que en el caso de los jamones, encontramos la paleta bellota estándar 10 % ibérica o la paleta cebo del campo, con 50 % de raza ibérica y la suprema paleta ibérica de bellota, con 100% cerdo de raza ibérica pura y alimentado en exclusiva con bellotas en plena libertad por las dehesas.