La edil de Economía y Hacienda de Coslada, Macarena Orosa.

El interventor general del Ayuntamiento de Coslada ha presentado en el Tribunal de Cuentas una denuncia por presuntas irregularidades en el pago de gratificaciones y horas extra en las nóminas de septiembre. El funcionario José Viñas, además, asegura que la concejal de Economía, Hacienda, Personal, Juventud e Infancia, Macarena Orosa (PSOE), le presionó por negarse a tramitar estos pagos. «¿Por qué haces esto ahora? ¡Te vas a enterar!», espetó supuestamente la edil. A pesar de las trabas iniciales, el alcalde Ángel Viveros firmó ayer por la mañana el abono de los salarios a la plantilla municipal, tras recibir los informes de Recursos Humanos y Secretaría General.

El informe de Intervención, fechado el pasado jueves, basa sus reparos en tramitar las nóminas en tres puntos, especialmente en una supuesta duplicidad en los pagos de las horas extra. «Se siguen interpretando y motivando verbalmente decisiones y actos que se incluyen en la nómina, sin que consten su justificación con las garantías y requisitos exigidos por la Ley (y que se deben realizar por la Concejalía de Personal), en este caso la inclusión de gratificaciones al personal por servicios extraordinarios y horas extra (…) sin que se cumpla la regla del servicio hecho y justificado», dice el escrito, que señala esta situación como una «anomalía grave». El importe sin argumentar, añade el interventor, es de un total de 50.404,53 euros.

«A gritos»

Detecta además que la propuesta «no se ajusta a los trámites e importes legales», habida cuenta de la presencia de conceptos irregulares –siempre según el informe– como las vacaciones o el complemento de antigüedad (137.844,67 euros), y un supuesto incumplimiento de «las normas internas y externas sobre confección y tramitación», en alusión a un retraso que es responsabilidad de personal.

Dadas las circunstancias, y con los pagos a la plantilla en punto muerto, se produce el hecho denunciado por Viñas sobre las presuntas presiones y amenazas. «Me dijo a gritos que por qué hacía esto ahora y no antes, con otros gobiernos, que era algo intolerable y que me iba a enterar», detalla el interventor general del Consistorio. «Es una limitación al trabajo de control que ejerzo», añade.

Sorpresa en el Consistorio

La denuncia presentada en el Tribunal de Cuentas, aseguran desde el Ayuntamiento, «es una sorpresa que desconocían». El alcalde, sin embargo, niega cualquier irregularidad y, una vez recibidos los informes preceptivos de las áreas competentes, levantó los reparos interpuestos y firmó los pagos.

Viveros, en segundo término, declaró a este periódico que «le extraña» que Orosa amenazara al interventor. Además, señala que Viñas se ausentó ayer de la Junta de Gobierno, a celebrar como cada semana. «No se ha presentado y ni lo ha comunicado ni ha delegado en nadie», indicó.