Uso correcto de las lentillas
Las gafas son una de las opciones más utilizadas para corregir los tradicionales problemas de vista, como pueden ser la miopía, la hipermetropía o el astigmatismo. Sin embargo, cada vez son más las personas que valoran la comodidad y mayor amplitud que ofrecen las lentillas en el día a día. De hecho, las lentillas Online se han convertido en las más empleadas en la actualidad. Una alternativa real que ofrece un gran número de ventajas, pero que también necesita un mayor cuidado y mantenimiento diario.
Al contrario que las gafas, las lentes de contacto necesitan un cierto periodo de adaptación, especialmente a la hora de colocarlas y retirarlas. Por este motivo es imprescindible establecer una rutina diaria con tiempo suficiente para conseguir la práctica necesaria. Aspectos como levantarse más temprano de lo habitual por las mañanas para acostumbrarse a su manipulación son básicos para acortar lo máximo posible ese periodo de adaptación y disfrutar de todos sus beneficios con las menos complicaciones.
El primer paso a la hora de manipular las lentillas es lavarse las manos antes de empezar, aunque siempre hay que tener cuidado de que las manos se encuentren completamente secas. Posteriormente, hay que asegurarse de que las lentes de contacto estén en su lado correcto, es decir, que tengan su forma natural curvada. Uno de los consejos más útiles para disolver las típicas dudas iniciales es fijarse que los bordes no apunten nunca hacia fuera, sino que cuenten con una forma curvada perfecta con los bordes hacia dentro.
El siguiente paso es colocar la lentilla sobre la yema del dedo índice, usando siempre la mano natural con la que se realizan las tareas diarias. Mientras, la otra mano debe mantener el párpado superior levantado para evitar parpadear a la hora de poner la lente de contacto. Para su correcta colocación es necesario que los demás dedos de la mano con la que se sujete la lentilla empujen hacia abajo el párpado inferior mientras se lleva el lente al ojo.
Posteriormente se debe soltar el párpado y cerrar despacio el ojo para permitir una correcta acomodación.
Limpieza y cuidado diario de las lentillas
Uno de los principales inconvenientes de las lentes de contacto es su rutina diaria de limpieza y mantenimiento para una correcta conservación, aunque actualmente existen en el mercado algunas desechables diariamente, como lentillas para astigmatismo. Las lentillas reutilizables y los estuches que la conservan necesitan un mínimo cuidado para evitar posibles infecciones y daños oculares.
A la hora de quitarse las lentillas es importante que las manos estén completamente limpias y secas para evitar posibles irritaciones. Uno de los consejos más prácticos a la hora de completar este proceso es establecer el hábito de empezar siempre por el mismo ojo, ya que cada una tiene su propia refracción y de esta forma se evitará confundirlas. Una vez retiradas hay que proceder inmediatamente a su limpieza aplicando la solución, recuerda que no se debe usar nunca agua corriente para lavarlas. Al mismo tiempo, la limpieza del estuche tiene la misma importancia que la de las propias lentes. Por este motivo es importante vaciarlos y limpiarlos con la solución de desinfección, pero nunca hay que dejarlos secar al aire.