Esperanza Oña es uno de los 35 miembros del nuevo Comité Ejecutivo Nacional del PP. La exalcaldesa de Fuengirola ha sido uno de los apoyos de Pablo Casado en Andalucía, un territorio donde candidato lo tenía especialmente difícil, después de la victoria arrasadora de Soraya Sáenz de Santamaría, y Javier Arenas, en la primera vuelta de las primarias.

¿Qué tarea les ha puesto el nuevo presidente del PP?

Transmite muchísima fuerza, su ilusión es contagiosa. Nuestro presidente quiere una Convención ideológica. Además, debe iniciarse una fase de integración y acuerdo dentro del partido, que debe ir en cascada. Primero un acuerdo entre candidatos, y luego los resultados deben tener efectos en las direcciones provinciales y territoriales.

¿Qué le parece el mal recibimiento que han dado el resto de los partidos al presidente del PP?

Ciudadanos sigue perdido. No tienen nada a lo que agarrarse y por eso hablan de una supuesta radicalización. Nosotros no debemos tener ningún problema en hablar de una derecha sin complejos. Hay que hablar con nitidez a los españoles.

¿Se ha dado un giro a la derecha?

No ha habido ningún giro, ni hacia la derecha ni hacia el centro, porque ya somos un gran partido de centro derecha. Lo que tenemos que hacer es hablar diferente, que se nos entienda, para recuperar el voto de los españoles que se decepcionaron y nos abandonaron, por esa nitidez en el mensaje que perdimos.

¿Qué perfil debe tener el nuevo secretario general?

Todo el mundo cabe en este proyecto y el presidente quiere integración, pero está claro que debe haber buena sintonía.

¿Dónde cree que debe estar Soraya Sáenz de Santamaría?

Debe sentirse cómoda en el partido que siempre ha sido el suyo. Quería ganar por el bien del partido, y cuando se pierde se tiene que interpretar igual, que es por el bien del PP. Es lo que ha querido este partido. Debe aceptarlo con deportividad y con normalidad democrática. No será fácil para ella, pero debemos trabajar juntos.

¿Y Cospedal?

Ya ha participado en esta nueva etapa aportando su confianza a la candidatura de Pablo Casado y alegrándose del resultado. Ha ayudado mucho. Tiene un sitio guardado, ella y también Soraya.

¿Es una derrota definitiva para Javier Arenas?

Con todo el respeto que se merece, estamos en una nueva etapa, y tiene que serlo en todas las provincias y territorios. Es una nueva etapa para todos. No será cómodo para él, pero el cambio de etapa también ha llegado a Andalucía.

¿Han quedado heridas?

Habrá personas que tengan experiencias desagradables, pero abrimos una nueva etapa. Hay que ir juntos y olvidar pronto lo pasado para hablar de futuro.

(ABC)