La Federación de Asociaciones de Periodistas de España blinda a la joven de “La Manada”
La Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) ha pedido a los medios que eviten la publicación de datos íntimos y confidenciales de la víctima del caso de «La Manada» y ha anunciado que denunciará las posibles vulneraciones del Código Deontológico de la profesión.
En un comunicado, la FAPE insiste en que la difusión de estos datos supone una «victimización secundaria» de la afectada, agravando su sufrimiento.
La Federación examinará este caso y si comprueba que algún medio ha vulnerado el Código Deontológico, lo denunciará ante la Comisión de Arbitraje, Quejas y Deontología -órgano de autocontrol interno de la profesión periodística-, y al que en su día acudió incluso La Casa Real, como contó en un acto reciente la expresidenta de FAPE, Elsa González.
Además, advierte de que «cuando los medios reproducen datos e imágenes de foros no cumplen con el llamado “reportaje neutral” (cuando un medio cita a otro medio), y pueden incurrir en vulneración del derecho a la intimidad, al honor y a la propia imagen, ya que está haciendo de altavoz de un hecho delictivo».
En este sentido, la FAPE precisa que, sin embargo, no se produciría la citada vulneración si un medio elabora una información en la que señala que los foros están publicando datos personales y fotos de la víctima de un hecho delictivo, pero sin reproducirlos.
Lo que dice el Código Deontológico del periodista
El artículo 5 del Código Deontológico señala que el periodista «evitará nombrar a las víctimas de un delito, así como la publicación de material que pueda contribuir a su identificación, actuando con especial diligencia cuando se trate de delitos contra la libertad sexual».
También indica que «con carácter general deben evitarse expresiones, imágenes o testimonios vejatorios o lesivos para la condición personal de los individuos y su integridad física o moral».
Colectivos feministas han denunciado que al menos dos foros con seguimiento masivo en internet han difundido datos privados de la víctima de «La Manada», una cuestión que está investigando la Unidad de Ciberdelincuencia de la Policía Nacional.
Nos preguntamos por qué la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE) no tuvo el mismo celo para defender a AD frente a las campañas e linchamiento social promovidas por otros medios (incluso con llamamientos al boicot comercial). Y no sólo AD. Sería interminable la lista de ciudadanos españoles denigrados y asesinados civilmente por los que hoy reclaman respeto para la joven víctima de “La Manada”, que hemos respetado siempre, sin necesidad de que el portavoz de la canalla mediática nos imparta ninguna clase de ética.
Amigo, no le digas a mi madre que soy periodista…
Ella piensa que trabajo de puta en un burdel.
Pues eso mismo.
Que Dios nos coja confesados, porque si no se puede confiar en la justicia, tan vapuleada por esos rebaños y manadas, vamos dados…
Eso, eso, que no se difundan los vídeos, fotos y testimonios donde se ve a la “víctima” amarrada al pilón como una posesa.
Estos MIERDOS de manipulación luego hablan de libertad de prensa, democracia y demás palabras que utilizan sólo para y cuando les interesa a su conveniencia.
Estos medios, todos, forman parte del régimen del 78 y viven de él mediante publicidad institucional, licencias y demás prebendas. El Pravda se queda muy corto comparado con estos panfletos que llaman periódicos.
Me gustaría ver el vídeo dónde dicen que le come el culo a EL PRENDA, mientras otros dos se la meten doblada, uno por delante y otro por detrás…
¡Pobre chica abusada!
Si por poco ACABA ELLA CON LOS CINCO…
Si esto es verdad, el video saldrá ante o después a la opinión pública, y los jueces serán los acusados, pero ocurre que no lo sabemos, no lo hemos visto, no podemos hacer juicios de valor aunque digan lo que les dé la gana, y chillen lo que quieran las féminas de nombre, son machembras, hay cosas que no cuadran. Una felación no se hace si no quiere hacerla. No digo más.
El vídeo estuvo rolando por las redes sociales hace tiempo pero fue borrado ante la presión policial y las consecuencias consiguientes.
Aún quedan fotos por allí, sólo busca .
Los periodistas al uso son parte fundamental del problema. Dejan de ser periodistas en el momento que se conciertan para publicar lo mismo. En este caso si hay una sombra de duda, que expuso uno de los jueces con su voto particular, en vez de investigarlo, a la voz del lobby LGTBI, se corre un tupido velo y se lapida al juez por emitir sus dudas al respecto. El periodismo está directamente comprado, sin más.
Añado un ejemplo de libro: el hundimiento del barrio del Rabal. Sin más comentarios.