Más de un millón de personas jalearon a la Legión durante el desfile procesional por las calles de Málaga
El Jueves Santo es uno de los días más especiales de la Semana Santa de Málaga, con la participación de la Legión en el traslado y escolta al Cristo de la Buena Muerte. Si ya por la mañana, medio millón de personas siguieron el desembarco legionario y los actos del traslado del Cristo de la Buena Muerte en la plaza de Santo Domingo, el desfile procesional por las calles de la capital costasoleña, que se prolongó hasta bien entrada la madrugada, congregó a más de un millón de personas, según fuentes municipales. Hubo presencia masiva de visitantes de toda España e incluso procedentes de numerosos países, quienes sucumbieron al hechizo de los Caballeros Legionarios. Todo un fenómeno sociológico de proporción universal.
La tradición nació de la mente y las manos del escultor granadino, Pedro Mena, hacia el año 1660, el Cristo de la Buena Muerte fue destruido en 1931 durante la quema de iglesias y conventos de Málaga del 11 y 12 de mayo de ese año, tras haber sufrido varios ataques y mutilaciones a lo largo de su historia.
De la talla original solo quedan una pierna y un pie casi carbonizado.
Sin embargo, diez años más tarde, el imaginero malagueño, Francisco Palma Burgo, decidió devolverlo a la vida.
Inspirándose en la escultura de su predecesor, talló un Cristo crucificado que superaba el tamaño natural del ser humano.
La imagen permanece resguardada en la Iglesia de Santo Domingo de Guzmán de Málaga y sale cada Jueves Santo.
A las 10.30 horas, el buque de la Armada que transporta a la Compañía de Honores de la Legión atracó en el puerto de la ciudad.
Desde allí, sobre sus hombros y al canto de ‘El novio de la Muerte’, los legionarios llevan al Cristo de Mena hasta su trono procesional.
Tanto el Cristo de Mena como la Virgen de la Soledad salieron de su Casa Hermandad de la plaza de Fray Alonso de Santo Tomás y se recogieron a las 2.00 de la madrugada.
A pesar de ser la más popular por su estrecha vinculación con la Legión, la cofradía del Cristo de la Buena Muerte no fue la única que saque sus obras de arte este Jueves Santo a la calle.
También lo hicieron Santa Cruz, Cena, Viñeros, Mena, Misericordia, Zamarrilla, Esperanza y Vera Cruz (la más antigua de Málaga; la primera referencia documental data de 1505).