El modelo español de seguridad y defensa (III): Criterios básicos de la defensa nacional
Enrique Área Sacristán*.- 1. La Ley Orgánica de Defensa Nacional. El proceso de integración en las organizaciones de seguridad, arriba descrito, se realizó con la Ley Orgánica 6/1980, modificada por la LO 1/1986, por la que se regulan los criterios básicos de la Defensa Nacional y la Organización Militar. En ella se establecían de una forma clara tanto los conceptos y definiciones como las competencias y responsabilidades de las diferentes autoridades y organismos que forman parte de la Defensa. En ella se definía en su Artículo segundo:
“La defensa nacional es la disposición, integración y acción coordinada de todas las energías y fuerzas morales y materiales de la Nación, ante cualquier forma de agresión, debiendo todos los españoles participar en el logro de tal fin. Tiene por finalidad garantizar de modo permanente la unidad, soberanía e independencia de España, su integridad territorial y el ordenamiento constitucional, protegiendo la vida de la población y los intereses de la Patria, en el marco de los dispuesto en el artículo 97 de la Constitución”.
Como se puede observar en esta Ley Orgánica, que ha sido referente para la organización de la defensa durante casi dos décadas, no contemplaba ni en la definición de la Defensa Nacional ni en su articulado, aspectos tan trascendentes como eran la cada vez más importante presencia de las tropas españolas en el exterior; mientras tanto, las FAS se estaban convirtiendo en una verdadera herramienta de la acción exterior del Estado.
Por otra parte, la publicación de la Revisión Estratégica de la Defensa supone un paso muy importante en el proceso de transformación de las FAS, pudiendo ser considerado como su punto de arranque, toda vez que en ella se definían aspectos tan importantes como la acción conjunta, los intereses nacionales de seguridad, o las capacidades militares a alcanzar, por mencionar algunos de ellos. Pero además en su elaboración se alcanzó un alto grado de consenso entre los principales grupos políticos lo que permitía contemplar la Defensa Nacional como autentica razón de Estado.
En las últimas décadas se han venido produciendo profundos cambios tanto en el marco internacional, con una mayor interdependencia de los Estados en el ámbito de la seguridad y defensa y la aparición de nuevos riesgos y amenazas, como los acaecidos en la propia sociedad española con una mayor proyección internacional de España. Además, en los procesos de cambio en el campo de la seguridad y defensa han sido dos los elementos clave: la adopción de un modelo de Fuerzas Armadas profesionales y la cada vez mayor presencia en el exterior. En estas condiciones se hacía precisa una profunda revisión de los criterios básicos de la Defensa, lo que se produce con la publicación de la Ley Orgánica 5/2005 de la Defensa Nacional (LODN) y la Estrategia de Seguridad Española en 2011.
No se trata aquí de hacer un análisis pormenorizado de esta Ley pero sí se deben resaltar algunos aspectos relevantes de la misma en relación con el modelo de seguridad y defensa, objeto de este estudio, como son los siguientes:
A diferencia de la anterior, que atribuía misiones a cada Ejército, ésta considera a las Fuerzas Armadas como una entidad única e integradora de las distintas formas de acción de sus componentes y que posibilita el empleo óptimo de sus capacidades. Se implanta una organización que diferencia con claridad la estructura orgánica y la operativa; la primera, bajo la responsabilidad de los Jefes de Estado Mayor de los Ejércitos, encargada de la preparación de la Fuerza; la segunda, cuyo mando recae en el Jefe de Estado Mayor de la Defensa (JEMAD), encargada de su empleo y establecida para el desarrollo de la acción conjunta y combinada. En lo que al empleo de las FAS, potencia y orienta la acción conjunta como integradora de las capacidades específicas de los Ejércitos, así como establece las condiciones y los procedimientos para la autorización de las operaciones en el exterior. A diferencia de la LO anterior en la que a las FAS se les asignaba como única misión la recogida en el artículo 8.1 de la Constitución de “garantizar la soberanía e independencia de España, defender su integridad territorial y el ordenamiento constitucional” la nueva Ley marca además otras tres misiones relacionadas tanto con la seguridad y defensa de España, como con sus aliados en el marco de las organizaciones internacionales; con la contribución junto a otras Instituciones del Estado a la seguridad y bienestar de los ciudadanos; y la evacuación de residentes españoles en el extranjero.
2. La contribución de las FAS a preservar los Intereses Nacionales de Seguridad
Ya hemos visto anteriormente que los Intereses Nacionales de Seguridad son aquellos que, por su particular importancia, merecen, si llega el caso, un esfuerzo de defensa, y que estos se pueden agrupar en dos grandes bloques: los compartidos con nuestros aliados y aquellos a los que específicamente debe responder España.
En la consecución de los intereses de seguridad citados cabe mencionar nuestra contribución a la estabilidad en el marco de la OTAN y la UE con la participación en la misión de ISAF en Afganistán, nuestra presencia desde el inicio del conflicto en los Balcanes en Bosnia y Kosovo o el despliegue en el Congo para facilitar la transición democrática de ese país.
De forma similar también es de destacar la contribución de las FAS españolas a la paz mundial mediante nuestra participación en las misiones de Naciones Unidas en las que además de Observadores Militares en distintos conflictos, hemos tenido una importante participación en la normalización democrática en Haití, finalizada en enero del pasado año, y en la pacificación del Líbano formando parte del contingente de UNIFIL.
Al interés de seguridad de mantener la paz y estabilidad en el Mediterráneo se pueden destacar algunas de las siguientes iniciativas en las que las FAS españolas se encuentran comprometidas:
En el campo de la cooperación militar la “Iniciativa 5+5”, en la que participan países ribereños de ambas orillas del Mediterráneo en distintas iniciativas en el área de defensa (ejercicios, intercambios o colaboraciones) El reciente despliegue de tropas españolas en el Líbano también puede ser considerado como respuesta a este interés estratégico de seguridad. La participación en la Operación de la OTAN “ACTIVE ENDEAVOUR”, aunque enmarcada dentro de la lucha global contra el terrorismo, puede ser considerada como contribución a la estabilidad mediterránea.
Por último, y teniendo en cuenta que España es uno de los países europeos que desde hace varias décadas está sufriendo las consecuencias del terrorismo, su desaparición debe de constituir uno de los principales intereses de seguridad. A la lucha contra el terrorismo, en el interior, las FAS españolas de manera complementaria a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y en el exterior en el marco de las organizaciones de seguridad y defensa, como pueden ser las operaciones, ya citadas, que se desarrollan en Afganistán (ISAF) y en el Mediterráneo (ACTIVE ENDEAVOUR).
El complejo fenómeno de la inmigración ilegal ha sido favorecido por la modernización y desarrollo tecnológico lo que ha facilitado los movimientos migratorios masivos desde sociedades con bajo nivel de desarrollo o inmersas en conflictos internos hacia las prósperas naciones occidentales. La llegada de estos movimientos incontrolados supone una amenaza para la seguridad global, no sólo por cuanto las sociedades occidentales puedan sentir amenazado el sistema del estado del bienestar, sino, y lo que es más importante para la porque la mayoría de ellos proceden de culturas y religiones que en muchas ocasiones no se integran en aquellas.
Las Fuerzas Armadas españolas están contribuyendo muy activamente con las Autoridades civiles y con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, tanto en el control del Estrecho de Gibraltar y las zonas fronterizas de Ceuta y Melilla como de la llegada de emigrantes procedentes del África Subsahariana a Canarias.
*Teniente coronel de Infantería y doctor por la Universidad de Salamanca
Pues sinceramente , yo veo un Ejercito débil, sin medios y sin valores , que sirve de ejercito lacayo a otras naciones , que sirven a intereses que nada tienen que ver con nuestros intereses, y veo a los militares sin valores, patriotismo , respetabilidad, dignidad, y han perdido todo lo bueno, que tuvieron no hace muchos años. Desgraciadamente es un Ejercito ,que se ha dejado destruir por los políticos, desde la Transición, ya no le llega ni a la suela de los zapatos de lo que fue hace 43 años, y lo malo que sus Jefes han colaborado en… Leer más »