El linchamiento del secesionismo al empresario alemán que humilló a Torrent
La constatación una vez más de que una parte de la sociedad catalana está profundamente enferma y que el mejor servicio que pueden hacer los empresarios alemanes, a ellos mismos y a sus empresas, es trasladarlas a cualquier parte del resto de España, lejos del tsunami separatista que amenaza con devorarlo todo.
Cuenta ABC que al poco de conocerse ayer por la mañana la identidad del empresario alemán que afeó al presidente del Parlamento de Cataluña, Roger Torrent, los actos no democráticos llevados a cabo por los líderes secesionistas, a los que deseó la cárcel, las redes sociales en internet se convirtieron en un campo fructífero para la descalificación, el insulto e incluso el boicot señalando los datos particulares de Karl Jacobi.
A este acoso y derribo digital -propio de linchamientos de otros tiempos- se sumaron -o incitaron- personajes más o menos públicos, todos independentistas. El economista Xavier Sala i Martin, por ejemplo, alentó a sus seguidores a que pongan en marcha un boicot contra las empresas de Jacobi, al que definió como «nazi»: «Deberíamos de dejar de comprar los productos de todas las empresas que expresan este tipo de odio y de todas las que hagan negocios con ellos. Podemos empezar por este nazi».
Si estos del Independentismo siguen , yo he de ver a miles de trabaajadores en paro, y la ruina de la ciudad Condal. Solo hay que esperar…
No creo que estos empresarios alemanes, que son personas serias, que buscan la seguridad jurídica, permanezca mucho tiempo en Cataluña…
Allí se quedarán sus obreros, convertidos en parados, “gracias” a la ayuda de lo separatistas.
¡Pero mientras haya dos millones de imbéciles que les voten, pues que le vamos a hacer!
Da gusto ver a los judíos y a los masones peleándose.
Pues sí, tienes razón, pero ahí está la diferencia entre el judío y el masón. El judío sólo mira por el dinero (su dinero) y el masón por la destrucción
Si ellos no se desinflan, ya los desinflarán por la vía de los hechos. Venezuela es mucho mas grande que Cataluña, y además, tiene petróleo. Han bastado dos iluminados y unos pocos años para llevarla a la miseria. Con una legión de iluminados y un territorio pequeño y con pocos recursos propios, ni te cuento. a no ser que dispongan en secreto de un sistema para convertir aguas fecales en petróleo. Tal vez algún iluminado separata, tenga esa fórmula…O la Piedra Filosofal.
Manda huevos que tilde de “nazi” a un empresario judío… están como chotas.
Dijo la verdad. Lo mejor que puede hacer él y los empresarios alemanes que han invertido en Cataluña es llevarse sus empresas y su dinero fuera de Cataluña. Siempre les quedará el dinero judío, sabiendo cómo se sabe de las buenas relaciones de la oligarquía catalana y de los subvencionados independentistas con los judíos.
Pero…., ¡pobres catalanes!.
Y pobres Aragoneses, Manchegos, andaluzes, gallegos, vallisoletanos…ni te jode…
Este es un tío con COJONES….traerlo y ENTREVISTARLO.
Que retorne a Germania y se meta con los suyosm Aquí sobra este energúmeno.
Aquí el único que sobra eres tú y la gentuza y demás energumenos como tú, que no produces nada y seguramente recibirás una subvención con nuestro dinero.
Iros a Cuba o mejor a Venezuela, a ver si o dan trabajo allí
Aquí lo primero que se debería investigar es de dónde ha salido la identificación de este empresario. Porque, si no recuerdo mal, cuando habló no dijo en ningún momento ni su nombre ni su empresa ni su teléfono. A ver quién ha sido el traidor.
El traidor de que?
Cuando aprenda Usted a escribir, igual me rebajo a contestarle, analfabeto.
Porque no le meten mano al del las chaquetitas por listillo.El javier sala martin o martinez.
Es demasiado listo, jider
Pues como se les vayan todas las empresas alemanas de Cataluña como les han amenazado, lo van a sentir.
Una mas, una menos, que mad da
Supongo que usted será algún enchufado, parado o jubilado, y que le da igual.
Pero no creo que a los empleados de sus empresas les dé lo mismo, ni mucho menos.
Y tampoco a sus proveedores, clientes, etc.