El forcón, una capea taurina única en el mundo
La comarca portuguesa de Sabugal, limítrofe con la zona española de Salamanca y Cáceres, despidió su tradicional Carnaval, conocido como el «Entrudo Gordo», con encierros taurinos y la tradicional capea del «forcón».
Se trata de unas singulares capeas únicas en el mundo y que solo se celebran en esta comarca, por lo que están clasificadas como Patrimonio Cultural Inmaterial, y a las que cada año acuden cientos de españoles, sobre todo de las regiones de Extremadura y Castilla y León, dada la proximidad.
El «forcón» es una estructurada elaborada a base de palos de roble y de pino que se van entrelazando hasta construir un artilugio de madera con forma triangular en el que se introducen los jóvenes dentro del coso, en este caso, un ágora improvisada junto a la iglesia del pueblo, informa Efe.
Tras la suelta de una vaquilla en lo que denominan «garraiada» -termino que usan para referirse a los encierros urbanos-, los mozos de Aldeia do Bispo esperaron la salida del morlaco en el «forcón».
Desde uno de los vértices, el más experimentado seguía en todo momento al toro y marcaba el baile y las vueltas que dan al unísono todos los que portan el «forcón» para evitar que el animal cornee a los compañeros.
Una y otra vez, el toro embistió el artilugio de madera, sujeto por una veintena de personas, la mayoría hombres pero también una mujer, una joven portuguesa de 25 años que fue la protagonista de la capea.
«Era la primera vez que veía el ‘forcón’, ya que vine con un amigo que es de este pueblo para conocer en persona esta tradición», explicó a Efe la joven, llamada Carolina Nunes, que fue retada a saltar al ruedo.
La joven sorprendió a los asistentes, ya que no es habitual ver a mujeres sujetar el «forcón». «Nunca lo había hecho, solo lo había visto en vídeo», manifestó, y reconoció que hizo bastante fuerza con los brazos, que acaban bastante doloridos.
En los remolques colocados junto a las talanqueras se agolpaban los visitantes, cientos de vecinos portugueses y españoles, que presenciaron esta tradición. En el interior del recorrido también había muchos jóvenes tanto de los pueblos de la comarca lusa de Sabugal como de las provincias españolas de Zamora, Valladolid o Salamanca.
«Vienen a ver el ‘forcón’ de todos los sitios de España», aseguró a Efe Rafael Santos, uno de los miembros de la Asociación de Aldeia do Bispo que, con la financiación del Ayuntamiento de Sabugal, organiza el festejo.
Una tradición
Durante los días de Carnaval, la capea del «forcón» se celebra tanto en Aldeia do Bispo como en otro pueblo de la comarca denominado Lageosa da Raia, aunque la gran mayoría de estas capeas se realizan durante el verano.
Aldeia da Ponte, Quadrazais, Lageosa da Raia, Soito, Rebolosa, Nave, Aldeia do Bispo, Vale de Espinho, Ozendo, Alfaiates, Forcalhos, Foios o Aldeia Velha son algunos de los pueblos de la comarca de Sabugal que mantienen viva en julio y agosto esta tradición.
Aunque su origen es incierto, algunos historiadores explican que el «forcón» se utilizaba como forma de protección contra los toros de lidia que se escapaban de algunas fincas españolas próximas a la Raya, como se conoce a la frontera.
Existen documentos en Portugal de hace 150 años que ya recogen la existencia de las capeas del «forcón».
Además de españoles y portugueses, este tipo de capeas son muy secundadas por el público francés, sobre todo por jóvenes descendientes de esta zona portuguesa cuyos padres emigraron a Francia en el siglo XX.