El líder de ERC pretendió que un funcionario de Estremera le hiciera la cama: “Señor Junqueras, esto no es un hotel”
El paso por la cárcel de los políticos catalanes acusados de sedición y rebelión está dejando un largo anecdotario y una conclusión sintomática: Junqueras, los Sánchez, Rull, Turull y demás presos preventivos no están hechos para las celdas, los patios y los comedores de los centros penitenciarios.
El exvicepresidente de la Generalitat lo demostró desde el primer día. La juez de la Audiencia Nacional Carmen Lamela envió a prisión a Oriol Junqueras y ocho exconsejeros de la Generalitat el pasado 2 de noviembre. Tras su primera noche en prisión, el líder de ERC se levantó y bajó a desayunar al comedor de su módulo de Estremera. Según cuenta ABC, un funcionario se le acercó y le dijo: «Señor Junqueras, suba a su celda, que tiene la cama sin hacer». «Ah, ¿que me tengo que hacer la cama?», respondió el político. «Sí, esto no es un hotel», zanjó el funcionario de Prisiones.
Junqueras regresó a su celda, adecentó el catre y regresó al comedor para tomar su primer desayuno carcelario. En el inicio de su estancia en el Centro Penitenciario Madrid VII, Junqueras comprobó que, pese a que Estremera es una de las cárceles más modernas de España y con mejores instalaciones y servicios, no deja de ser una prisión. Pidió una camiseta porque quería jugar a baloncesto. Los funcionarios hicieron todo lo posible, pero no contaban con una de la talla adecuada. Le dieron la más grande, pero le quedaba «por encima del ombligo», relatan al citado diario fuentes penitenciarias.
De los exconsejeros de la Generalitat, el único que permanece en prisión es Joaquim Forn, el que fuera titular de Interior. Por su parte, Josep Rull, exconsejero de Territorio de la Generalitat, contó en Catalunya Ràdio tras salir en libertad provisional que el menú de Estremera le hizo «sufrir mucho». «Salí con toda la boca llena de llagas. Era una comida muy flatulenta, para entendernos, un cocido de aquellos intensos. Recuerdo que el primer día nos dieron unas hamburguesas que estaban tan quemadas que se me rompió el tenedor», aseguró.
Tras estas declaraciones, se supo que en los menús completos que tomaron en Estremera se combinan carnes, pescados y verduras. Durante la Navidad disfrutaron, como el resto de reclusos, de menús especiales. En Soto del Real, también en Madrid, continúan Jordi Sànchez, el líder de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), y Jordi Cuixart, presidente de Òmnium. Como desveló este diario, Sànchez protagonizó una hilarante anécdota sus primeros días en la cárcel. El preso de confianza que fue designado para acompañarlo en la celda pidió a la dirección del centro penitenciario el cambio de celda porque «no podía aguantar más» al líder de la ANC.
Los responsables de Soto del Real accedieron a la petición del recluso, quien manifestó que el presidente de la Asamblea Nacional Catalana era «insoportable» porque estaba «todo el día dando la matraca con el tema del independentismo».
La petición causó cierta sorpresa, ya que el compañero de celda del líder independentista era un preso de confianza, de los designados entre los de mejor comportamiento para acompañar a los novatos, especialmente si son de un perfil relevante. No pudo más y solicitó ser sustituido por otro interno. Al margen del independentismo, el recluso alegó que Jordi Sànchez era «muy raro» en lo personal y que le hacía sentir «incómodo».
Tiempo después, mientras Sànchez asistía a la misa dominical, un preso que estaba a unos metros del líder de la ANC aprovechó para apuñalar a otro con un punzón, lo que provocó un gran revuelo. Los funcionarios controlaron rápidamente la situación.
Tampoco nos pasemos. Es normal que el primer día que alguien esta en la cárcel pueda preguntar por esto, por la limpieza de la celda… o el fregado de los platos.
http://m.bild.de/regional/berlin/cottbus/wut-demo-nach-gewalt-attacken-54546358.bildMobile.html
Debe ser que no hizo la mili. En el ejército, no te pedían amablemente que hicieras el catre, te caía el arresto.
Fray Porqueras no debe poder olvidar su crisol pequeño burgués y le deben salir esos tics de llamar a la “Miñona” (la sirvienta) de cámara con una campanilla desde la mesa camilla, mientras termina de atiborrarse de fuet y calcots.
Como “El último emperador” pero en versión nano.
Estos están todavía mejor, que cuando me toco hacer la mili. (que recuerdos) pero nos hicieron hombres de provecho, dudo que estos salgan y se pueda aprovechar algo de ellos.
Quería pedir para el Sr. Junqueras una salida de cárcel con camiseta amplia y honesta… Pero, al pedirlo, aquí, en mi humilde rincon de Berlin, el escrito de su articulo se borro al quererlo pasar… Se lo pedía al PP, porque se, que eso es lo que debe ser… Cuiden a este senyor… Todo es un empezar en esta cueston… Sirias NO!
No te molestes, pero es que no se te entiende qué quieres decir.
Hasta en la cárcel son ridículos.
No se porqué, pero me da la impresión de que el gordo este va a estar muchos años a pensión completa…, haciéndose la cama, y lmpiándose la “suite”.
Han sufrido tanto que piden la libertad para volver a las andadas y regresar al trullo.
Ya sabes lo que te espera, puchdemente, a ver cuando te acercas a España de una vez