Por la dignidad de España
(R) La actual situación española en lo político está caracterizada por la convivencia con lo aberrante considerado como situación normal. Y ese aceptar lo anormal es incompatible con nuestra dignidad.
De un lado el proceso de abierta escisión de Cataluña ante la clase política que lo observa impasible lo vivimos como una especie de intercambio de argumentos y contraargumentos para ver si Rajoy convence a Mas o para ver quién es más ingenioso, como si no estuvieran en juego emociones y sentimientos propios de una guerra civil. La independencia o sometimiento de un país es un suceso visceral y vital como aquel en que se arranca un trozo del propio cuerpo. La gente por la independencia o para impedirla se juega la vida (Véase Ucrania).
De otro, nos obligan a considerar a los enfermizos ajuntamientos homosexuales tan buenos como el matrimonio natural; a los niños en los colegios y escuelas con la ideología de género se les enseña que los homosexuales tienen privilegio sobre los niños sanos, los heterosexuales. Se fomenta también en las escuelas la normalidad de lo patológico, que la sexualidad es de libre elección y que la adopción de hijos por parejas de pervertidos es normal. Del mismo modo se enseña el desprecio a la Patria y a insultarla. También se nos acostumbra a convivir con la vestimenta inmoral (enseñando los pechos) de las actrices, costumbre que adoptan cada vez más mujeres como si los hombres sanos fuesen inmunes a la llamada del sexo. En las series televisivas muchas mujeres actúan como marimachos, reflejando el unisex o andrógino que la masonería nos quiere imponer. No debemos reaccionar ante nada es el mensaje oculto. Eso es el progreso para la izquierda (desde el PP hasta IU).
Del mismo modo convivimos con la corrupción que impregna todas las estructuras de poder desde los Tribunales al Ejército, pasando por la covacha (despectivo de cueva) de los políticos a todos los niveles desde el humilde concejal al altivo diputado. Los tribunales son los medios de los que se vale el poder para legitimar la corrupción alejándolos de su principal función: defender a los ciudadanos indefensos. Y si algo no nos parece normal debemos aparentar que nos lo parece.
Ante esta serie de esperpentos que se muestran a la mirada tan atónita como atemorizada del español, no nos atrevemos a protestar porque previamente nos han acostumbrado desde hace 40 años a convivir con lo anormal, es decir sin dignidad. Debemos pues aceptar lo que nos impongan, que al final es la explotación económica.
De esta situación surgen tímidas protestas de grupillos como Vox que no se atreven a plantear soluciones enérgicas para no granjearse la oposición de algún posible grupo de votantes. Y por ese miedo, por esa indefinición al manifestarse, consiguen ser tan vomitivos como el tándem PP-PSOE que ha pilotado el desgobierno de la desgraciada Transición.
Por otro lado se nos presentan las alegres comadres de Podemos que nos prometen erradicar la corrupción por su sola presencia (como si fueran alienígenas) no sólo sin indicar qué medidas van a tomar, sino estando ya antes de alcanzar el poder marcados por todo de tipo de corrupción desde Tania Sánchez, la pareja sentimental de Pablito y quinta columna de Podemos para destrozar IU, pasando por Íñigo Errejón hasta el mismísimo Pablito, fiel lacayo del régimen comunista venezolano y del musulmán iraní, a los que debe sumisión porque le pagan. Y le pagan para tener en la Unión Europea una quinta columna que les apoye.
Un partido que quiera ser solución para los españoles debe evitar los posicionamientos ambiguos y huir de complacer a unos y otros. Debe ofrecer respuestas clara y rotundas a los problemas actuales a sabiendas de que no van a gustar a muchos y de que se va a granjear muchas enemistades de entrada. No debe esperar a la utópica llegada al poder para concretarlas, sino avanzar con paso firme y un destino claro y declarado.
Un partido que quiera ser tenido en cuenta por los españoles debe publicitar sus principios con confianza y orgullo y tomar posiciones basadas en ellos, y tenerlos en lo alto y gritarlos (tanto sus principios como las normas que de ellos se deriven con respecto a la Nación Española, la Patria, la religión, la corrupción, la educación, la libertad, la justicia etc. etc).
La regeneración de la vida política de España, la vuelta a la dignidad, exige antes que nada hacer desaparecer la corrupción, lo que es todavía posible, y previamente liberar a los tribunales del sometimiento de los políticos.
Plantear un pacto contra la corrupción es ya una aceptación de la corrupción y es definir dónde y cuándo actuar corruptamente sin castigo. Suprimir la corrupción precisa de una legislación decidida para cortarla, lo que hasta ahora nadie y mucho menos los ya corruptos de Podemos ha propuesto. La corrupción puede recibir un golpe de gracia mortal con medidas tan sencillas como las siguientes normas (tomadas del programa del partido político: Democracia y Dignidad).
16-2º Para lograr la independencia de jueces, fiscales y magistrados éstos designarán entre sus miembros a los componentes de los Tribunales Superiores de Justicia: entre otros a los del Tribunal Supremo, a los del Tribunal Constitucional, a los miembros del Consejo General del Poder Judicial, al Fiscal General del Estado y a los tribunales superiores de las comunidades autónomas”.
“2-6º Supresión de las subvenciones individuales y discrecionales, que vulneran la igualdad de los españoles ante la ley.
14-2º Las administraciones públicas deben funcionar con déficit presupuestario cero.
15-4º Todo funcionario o responsable de cargo público que autorice pagos presentará mensualmente y en los tres primeros días de cada mes, la relación de los gastos que autorizó, con los detalles que permitan identificarlo así como al suministrador del gasto.
15-5º La no presentación mensual, como la ocultación en todo o en parte de partidas de pagos autorizadas se considerará delito de apropiación indebida por el importe de lo ocultado o no declarado en tiempo y forma, y delito de falsedad en documento público de los que será responsable el funcionario que autorizó el gasto.
15-6º Todo funcionario o responsable de cargo público condenado por un delito, aunque haya prescrito, será expulsado de la Administración, sin indemnización alguna.
15-7º Los actos discrecionales de los funcionarios u órganos administrativos que impliquen la concesión de derechos a particulares deberán publicitarse del mismo modo que las autorizaciones de pagos. El incumplimiento en su publicación llevará aparejada las mismas sanciones que el incumplimiento de la publicación de las autorizaciones de pago.
Mientras consintamos convivir con lo aberrante, en España no tendremos la dignidad que nos corresponde.
El gran problema reside la invisibilidad de cualquier partido o movimiento político que no represente lo políticamente correcto; los que llevan en el poder desde la transición ya se han encargado de que todos los medios de comunicación de masas estén a su servicio y aquí como en cualquier otro país si no sales en la televisión no existes.
Se equivoca el articulista no existe convivencia con lo aberrante sino imposición legal de lo aberrante.
El cuarto párrafo es el verdadero problema, quizás una futura magistratura a nivel europeo al estilo de la federación de árbitros salvando las distancias, que jueces externos se ocupasen de los procesos de corrupción en los estados miembros y una estancia superior controlada por auditores y comisarios de la población civil. Se acabarían las bromas con el dinero de todos. STOP POLÍTIC@S DESCONTROLADOS Y PARTIDOS. Partido con corrupción partido erradicado. No más subvenciones ni más dinero a partidos y sindicatos que no nos va ni nos viene.
Caballero: Como reza este espacio : Sin Media Tintas.
El partido que cita es una cromo de la Segunda República
Dado el caso, no esperemos nada de políticos, Ni Ejército.
Sino como en 1808 , cuando Zaragoza recibió a las Tropas Napoleonicas, (sin apoyo militar).
Tal es el espíritu Español.
En base a qué dice Ud. que el partido Democracia y Dignidad es un cromo de la II República?
Ni por su origen ni por sus principios tiene nada que ver con la II República
Totalmente de acuerdo,pero el punto 15_6 ponerle un anexo, que todo funcionario o político que se lucre del dinero de todos se le cuelgue de las pelotas hasta la muerte. Ya veríamos todos si funcionaba o no.
Buen relato de hechos. Un desastre sin paliativos. Cientos de miles de personas viviendo de los demás. Decadencia de la propia cultura, arraigo de otros cientos de miles con religiones extrañas cuando no contrarias directamente con la libertad. A burro viejo no le cambies en el camino. Las medias contra la corrupción estan bien,, que todos guarden hasta el último recibo con la factura correspondiente. Clavados cada uno en su puerta todos los papeles y si no que le cuelgen al funcionariata. Luego que quiten todos los parlamentos autonómicos. Que las cortes se reunan en esos edificios. Dejar los ayuntamientos… Leer más »
Todavía ha profundizado mas y mejor en temas que no ha tocado el señor Boya.
De los dos ejemplares que habla al final, que cobren el paro correspondiente a los años “trabajados” y si les corresponde cuando se les termine , reciban la ayuda de 400 euros y por supuesto desalojando la casita.
Si el ultimo emperador chino acabó de jardinero , a estos de que se les podría poner.
Se les podría poner en las cárceles pelando patatas, recogiendo la basura , limpiando los baños y todo lo que haga falta para que sean más higiénicas y no sean focos de enfefrmedades que escapan a la sociedad.
No es que vivan de los demás, es que se enriquecen de los demás. Obligan a los demás a satisfacerles sus caprichos de ricos mediante la subida de las tarfias fijas de las facturas energéticas y de agua. La gente no se puede escabullir ni ahorrando en consumo, lo cual es beneficiosos para el resto, porque no es la tarfica de la componente variable y dependiente del consumo lo que más suben. Obligan a la gente a pagar la deuda que contrae rajoy para quedar bien y para salvar a losd e su clase. Obligan a la gene a rescatar… Leer más »