François Hollande también es culpable del tiroteo en los Campos Elíseos de París
Otros dfos policías franceses muertos como consecuencia de un tiroteo registrado este jueves por la noche en los Campos Elíseos de París y que ha concluido con la muerte del agresor, abatido a tiros en plena calle. La islamización de Europa, con los crímenes que ha provocado y las víctimas que se cobrará en el futuro, ha sido un proceso de ingeniería social promovido e impuesto por las élites políticas, por dirigentes como François Hollande. Las sociedades, los ciudadanos, han asistido indefensos a lo que ha ido tomando trazas de una auténtica invasión. Ninguna necesidad económica, nada mínimamente racional, explica lo que se ha vivido y que ha generado un problema de extraordinaria gravedad. No hay precedentes en la historia de esta soberana estupidez. Ningún sector económico, ningún aspecto social ha sido beneficiado por la presencia de una población musulmana expansiva. François Hollande ha sido uno de las más entusiastas promotores de esa invasión. Suya es también la responsabilidad delas dos muertes de anoche.
Ante todo este panorama, que se acompaña por añadidura con la pretensión de desarmar a las víctimas admonizándolas de racistas, xenófobas e islamófobas cuando se atreven, con timidez y acallados por los medios de comunicación, a protestar ante lo obvio y lacerante, ante las matanzas de una crueldad inusitada y animalesca. Incluso se les pretende obligar a creer falacias tan patéticas como que esos crímenes nada tienen que ver con el islamismo o que la autodenominada sumisión es una religión de paz.
Ejercer hoy la libertad de expresión en Europa implica un riesgo para la vida, porque los políticos europeos han propiciado lo que tiene trazas de una invasión en toda regla y porque han desarmado intelectual e incluso policialmente a las sociedades.
Tanto la invasión de las sociedades europeas como esta absurda geoestrategia, propia de dementes, que ha conllevado el genocidio de los cristianos en Irak y Siria, poblaciones con dos mil de años de tradición, no se entiende sin el factor del petróleo y la sumisión de las naciones occidentales a los dictados de los Saud. En 1973, los países musulmanes productores de petróleo estuvieron a punto de poner a las naciones occidentales de rodillas. De inmediato, se abrieron las fronteras y se permitió la construcción de mezquitas financiadas por los saudíes, dedicadas a difundir el wahabismo, la interpretación rigorista de El Corán de la que han surgido y se alimentan los integristas asesinos. Toda la política exterior de Occidente de las últimas décadas ha sido dictada por Arabia Saudí, cuya polígama y extensa familia Saud aspira a liderar el mundo islámico y, por ende, el planeta.
En buena medida, puede decirse que nos encontramos ante los estertores del yihadismo, que tiene mucho de suicidio del islamismo, de autodestrucción de un mundo que no aporta nada al conjunto de la especie, fuera de las reservas petrolíferas, que no ha descubierto nada, que no ha contribuido con ningún adelanto técnico, que es solamente, en su desquicie, un factor de inestabilidad y sufrimiento, de tiranías crueles y de servilismo y miseria.
La cuestión es plantarle cara y dar marcha atrás en el proceso de ingeniería social que ha llevado ese peligro al interior de las sociedades europeas. Eso pasa por la sustitución de los actuales dirigentes europeos, de cuantos, con tanta impostura e hipocresía, se rasgan hoy las vestiduras. Y también de los partidos que los sustentan. Eso implica una reacción salvadora de los ciudadanos europeos, que sí se está produciendo, de manera alentadora, aunque en España continúe la tiranía de lo estúpidamente correcto.
Habrá que acabar con el asistencialismo tontorrón y suicida, con la nacionalidad como patente de corso, con los viajes turísticos a Siria, expulsar a los integristas de Europa, cerrar las mezquitas que promuevan el asesinato, aislar a los musulmanes (“doctrina Truman”) hasta que separmos quiénes constituyen y quiénes no un potencial foco de peligro. El yihadismo nunca hubiera sido el peligro que ahora nos acecha con un Occidente fuerte y dejará de serlo cuando Europa se recupere en sus valores y erradique a quienes la han hundido, los políticos europeos a derecha e izquierda. Traidores y canallas.
Por otra parte, debemos acusar y y acusamos a intelectuales de izquierda y políticos de haber llenado Europa de “cadáveres y barrios integristas”. Ambos colectivos han vendido “las virtudes de la diversidad” y ello les convierte en “culpables” de atentados como los sufridos hoy en Alemania. Los terroristas no son yihadistas, ni locos aislados, son musulmanes.
Acusamos también a los medios informativos europeos de ser cómplices de los asesinatos islámicos en suelo europeo. Prefieren que la llaga purulenta se siga extendiendo a tener que modificar su visión angelical del islamismo y dar así la razón a la “malvada ultraderecha”.
Tras la masacre de ayer, la preocupación de LaSexta no eran los muertos y heridos, sino que el atentado aumentara las posibilidades electorales del Frente Nacional francés. Es decir, que maten a ciudadanos europeos y aumente la inseguridad en Europa es mucho menos importante que proteger la estrategia aniquiladora de Europa que ha sido puesta en marcha por la élite globalista.
Mientras el atentado había sido reivindicado por el Estado Islámico a los pocos minutos de perpetrarse, muchos medios seguían ocultando la naturaleza islámica de esta nueva masacre.
Ayer hobo otros dos muertos europeos (que no se registraran más víctimas mortales se debió a que los policías contra los que se dirigía la acción llevaban chalecos salvavidas). En los días previos hubo una matanza de cristianos en Egipto y casi veinte fallecidos en el metro de San Petersvurgo.Ambos en nombre de esa “religión de la paz” que tanto fascina a los progres de Occidente.
¿ Donde están los moros “buenos”, se supone que ya deberían estar tomando las calles y condenado el atentado??; me parece a mi que va a ser verdad de la buena el dicho que dice que el moro malo quiere matarnos, y el bueno, quiere que nos mate el moro malo. Cría cuervos y te sacarán los ojos. En el momento que tengan la suficiente fuerza de voto………… van a tener que salir por patas de su propio país……. tendrán que llorar como mujeres lo que no supieron defender como hombres. Lo malo es que hay otro refrán que como… Leer más »